El 17 de noviembre de 2021, antes de las 10 de la mañana, Lucas González y su grupo de amigos fueron baleados desde un auto sin identificación policial pero donde iban los policías Gabriel Isassi, Fabián López y José Nievas. Si bien no hay dudas con respecto a su responsabilidad (por lo menos con lo necesario para esta instancia), aún quedan algunas medidas para dejar en claro su accionar. Además, la causa atraviesa en este momento una situación clave con respecto al encubrimiento, donde hay implicados una docena de policías.

En este tramo es que esta semana la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional confirmó los procesamientos de los primeros cuatro involucrados por el encubrimiento y el falso testimonio. Se trata de los policías Roberto Inca, Héctor Cuevas, Fabián Du Santos y Juan Romero. Por otra parte, decretó la falta de mérito de dos agentes, justamente sobre su responsabilidad es que debe profundizarse la investigación, para establecer cual fue su rol.

“En el marco probatorio descripto, no se vislumbra ni ha sido ponderado ni alegado por las partes, la existencia de una comunicación que las relacione con el despliegue realizado por sus coimputados, ni que permita afirmar que hayan tenido el conocimiento que ellos sí tenían de que no había ocurrido un enfrentamiento armado como se había informado instantes antes”, dijeron los camaristas. 

La Cámara tendrá que expedirse también sobre los procesamientos dictados a fin de diciembre y que involucran al comisario inspector Daniel Santana, al comisario Rodolfo Ozán, al subcomisario Ramón Jesús Chocobar, y a los oficiales Sebastián Baidon, Jonathan Alexis Martínez, Ángel Darío Arévalos y Daniel Rubén Espinosa.

Con respecto al encubrimiento, el juez Martín del Viso ordenó una rueda de reconocimiento que ayude a dilucidar el rol que tuvo la abogada Verónica Andraca, integrante de la División de Asuntos Penales y Contenciosos del Departamento Asesoría Legal de la Policía de la Ciudad. Los testigos la señalaron en diálogo con los imputados ese día y lo que se intenta es determinar si efectivamente estuvo esa mañana y en qué condiciones (por su rol, no debería haber estado allí). Esa medida se llevaría adelante la próxima semana.

La otra medida que llegó al juzgado esta semana y que había sido pedida por la Fiscalía es un adelanto del informe pericial donde se determinó que los tres policías tenían algunos rastros de haber disparado armas de fuego. Las conclusiones finales se conocerán en las próximas semanas, ya que aún falta analizar unas 14 muestras que fueron recolectadas.