El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, aseguró que el Gobierno nacional no planea no llegar a un entendimiento con el FMI. "Ningún argentino puede estar tan loco como para pensar que puede haber un default", declaró.

El ex jefe de Gabinete de Cristina Kirchner conversó con Diario Perfil y coincidió en la idea de lograr un acuerdo con el FMI. Sin embargo, en ese marco, planteó: "Depende de cómo sea el acuerdo. A cualquier precio, no. Siempre hay que bregar por un acuerdo razonable e inteligente que les permita a los argentinos vivir para poder pagar".

"Ningún argentino puede estar tan loco como para pensar que puede haber un default. Hablamos seriamente de un acuerdo que no ponga en riesgo el crecimiento. Néstor Kirchner decía que los muertos no pagan deudas. No hay que poner en riesgo el crecimiento para poder juntar lo necesario para pagar. Estoy convencido de que llegaremos a un punto común que nos sirva a todos", agregó el ministro.

En ese marco, también dio su visión sobre la última carta de Cristina Kirchner, donde asegura que el acuerdo con el Fondo depende de un entendimiento en el Congreso de la Nación: "En la historia hubo muchísimos hombres y mujeres de la política que establecieron un sendero de costumbres epistolares. No tiene nada de novedoso. Algunos hablan hasta por los codos. Cristina no es de mucho hablar en esta época. Puso cuatro cartas que dicen mucho y obligan a que le presten atención".

A su vez, también se imagina a un Alberto Fernández como candidato para 2023: "Lo peor para Alberto ya pasó. Encontró un país devastado, hecho pedazos, económicamente con vencimientos en el 20, 21, 22, 23. Tuvo que resolver el tema de los acreedores privados; después, el tema de Club de París que viene desde 1957, cuando la revolución fusiladora toma un préstamo de U$S 700 millones, so pretexto de pagarlos con lo que generara. La misma tarea de ahora con el Fondo Monetario Internacional".

En ese marco, también aseguró tener una relación muy buena con Juan Manzur y con los gobernadores, que también imaginan un proyecto alternativo dentro del Frente de Todos. "La relación es muy buena. Es muy buena la relación del Presidente y los ministros con los gobernadores. También, la relación de Manzur con los gobernadores", declaró.

Y por último, advirtió que el único gobernador que quiere mostrar diferencias es Juan Schiaretti: "Muestra lo que fue siempre. Cuando fui jefe de Gabinete, un día me llamó Cristina para que me sentara con Schiaretti a encontrarle una salida a ver cómo hacíamos alguna cosa común. Después de haber discutido tres o cuatro horas, no pudimos hacer nada. Es la visión que siempre tuvo. Tiene todo el derecho, no la objeto. Pero lo que hace ahora lo hizo siempre".