La abogada querellante Valeria Carreras aseguró hoy que "a los tripulantes del ARA San Juan los mandaron al muere, no fueron víctimas de una tormenta perfecta" y pidió que se tenga por apelado el rechazo de la imputación hacia el ex jefe de la Armada, Marcelo Srur, el expresidente Mauricio Macri y el exministro de Defensa Oscar Aguad, y "se los procese por homicidio agravado por dolo eventual".

El pedido de la querella fue adherido por el fiscal Norberto Bellvet y pidió este viernes ante la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia que se realicen las indagatorias. El sábado continúan las audiencias, que se dan en el marco de la apelación a la resolución de la jueza federal de Caleta Olivia Marta Yáñez. La Cámara Federal de Apelaciones tiene una semana para analizar lo solicitado por Bellvet.

Previo a esta instancia, en febrero pasado, Yáñez dictó el procesamiento, sin prisión preventiva, a seis ex altos mandos de la Armada Argentina y el sobreseimiento a un séptimo marino por el hundimiento del ARA San Juan con sus 44 tripulantes y rechazó investigar posibles responsabilidades políticas en ese caso.

Carreras, que representa al cabo principal Enrique Damián Castillo, uno de los 44 tripulantes muertos en noviembre de 2017 cuando implosionó el submarino, consideró que las autoridades navales ocultaron información "para que nunca se llegue a la verdad"  y que "manipularon" las pruebas y sostuvo que el desenlace fatal que llevó al hundimiento del submarino fue "una falla en el compartimiento de baterías que generó un clima tóxico en el interior, inutilizando la capacidad de maniobra del submarino que se sumergió e implosionó".

La letrada cuestionó incluso la localización de la nave a más de 200 metros de profundidad y cerca de las 200 millas, que "solo se justifica en una situación de conflicto o guerra, como pudo haber ocurrido durante el conflicto de Malvinas".

Además, denunció que la embarcación "no tenía pirotecnia (para pedir auxilio)", que "la radio baliza no estaba certificada", que "los trajes no tenían certificación" y que "el carenado no estaba hecho", a lo que agregó que aún en esas condiciones "salieron igual".

Carreras enumeró las sucesivas conversaciones que mantuvo el comandante del submarino, capitán Pedro Martín Fernández, en los momentos previos al desenlace fatal, con lo que desacreditó la versión oficial de la Armada que redujo el naufragio a situaciones desconocidas.

Otra de las representantes de la querella, Lorena Arias, cuestionó la actitud de ubicar a la tragedia como un "error humano" porque "por un lado dicen estar orgullosos de la tripulación y por el otro los señalan como los culpables".

"No se falla por un episodio sino por una serie de hechos y eso también está estudiado, la teoría del efecto dominó no se usa más porque el error humano es la consecuencia, no la causa, para que todo falle tiene que funcionar mal la tecnología, los reglamentos y el entrenamiento y si es así lo que falló es la Armada Argentina", expuso Arias.

La causa sobre el hundimiento del ARA San Juan llevada a la apelación está caratulada como "López Mazzeo, Luis Enrique y otros por abuso de autoridad y deberes de funcionario público".