Finalmente, la provincia de Buenos Aires tomó el mismo camino que CABA y no adoptó fuertes medidas para frenar el aumento de contagios por coronavirus. Lejos del "toque de queda sanitario", aparecieron restricciones para los comercios a partir de la 1 de la mañana.

Según pudo saber Data Clave, Axel Kicillof no habría llegado a un acuerdo con todos los intendentes para poder frenar la circulación nocturna. Eso sí, regirán fuertes medidas para quienes hagan o participen de fiestas clandestinas.

En el medio están los turistas, que buscan tener una buena temporada de descanso, a pesar del covid-19 y de las complicaciones. En ese sentido, Data Clave habló con Cristian Cardozo, intendente del Partido de La Costa. Habló de los números sanitarios, de  la demanda económica y cómo es la noche en su distrito, que de momento es el más elegido por los turistas, superando a Mar del Plata.

La entrevista completa:

Data Clave: ¿Se puede decir que volvieron a la normalidad tras las últimas reuniones para definir medidas?

Cristian Cardozo: Estamos más tranquilos la verdad, porque todos los sectores turísticos trabajamos para mantener la temporada, pero también entendemos la situación epidemiológica. Las medidas que se tomaron son necesarias para poner paños fríos y encontrar soluciones para disminuir los casos, pero sin restringir las libertades de las personas y familias.

DC: ¿Considera acertadas las últimas medidas que se tomaron?

CC: Lo que entendemos es que medidas hay que tomar, uno no puede dejar de hacerlo porque sino la situación corre de eje que esta es una temporada atípica por el virus. El aumento de los casos, más allá de las fiestas, también se dieron porque notamos cierto relajamiento social en las medidas de prevención. Habían actitudes en todos los grupos etarios que meses atrás no sucedía, desde jóvenes hasta familias. Con este nuevo instrumento de la Nación, sumado al sistema provincial de fases, podemos tomar medidas de acuerdo a un estricto seguimiento de los casos.

DC: ¿Cómo está la temporada en La Costa?

CC: En lo personal me siento muy orgulloso del comportamiento de nuestra comunidad y nuestros visitantes. Hay una particularidad y es que tenemos 96 kilómetros de playa y 14 localidades, los que nos da una extensión para un buen distanciamiento. Por eso nuestro coeficiente en comparaciones de infectados y habitantes y turistas es muy bajo. Hoy también recibimos los datos desde el Ministerio de Turismo y fuimos el más elegido por los turistas. Lo que hicimos fue prepararnos para el verano, incluso cuando no sabíamos si se iba a dar la temporada. Tenemos un buen sistema de aforo de playas con 250 personas para controlar cuáles son las playas más y menos ocupadas, con el fin de tomar medidas para que haya mayor distancia.

DC: ¿Cuáles son los números sanitarios a día de hoy? ¿Hay muchos turistas contagiados?

CC: Hoy estamos con 115 casos activos, somos 100 mil habitantes y aproximadamente en un momento pico de turismo somos 400 mil. Nos da un número bajo de casos activos, y en ese universo hay casos positivos de nativos de La Costa y visitantes. En cuanto a los turistas, si vemos que no tienen casa y están impedidos, nosotros lo que sugerimos es que vuelvan a su lugar de origen. Y si no puede volver en auto o vino en otro transporte, desde el municipio los alojamos en un hotel y luego los trasladamos en combis. Por ahora no tuvimos traslados, aunque tuvimos familias que sí volvieron a su lugar al poco tiempo de llegar. Fueron aproximadamente 12 casos.

DC: ¿Qué transmiten los comerciantes en cuanto a la demanda y la circulación de personas? ¿Qué ocupación tienen respecto del año pasado?

CC: Quizás no es la cantidad de turistas que esperábamos con respecto a la temporada pasada, pero es lógico. La temporada pasada fue muy buena y los números fueron ampliamente superiores. En cuanto a la demanda, los bares, por ejemplo, trabajaron mucho más que la temporada pasada por el cierre de los boliches. Nosotros les permitimos que estén afuera y ubicar mesas para que la gente pueda estar al aire libre. Están funcionando bien, aunque ahora empezaremos a monitorear las nuevas medidas, dado que tienen que cerrar a la 1 de la mañana. Después los restaurantes y los comercios están trabajando, aunque lógicamente no es el mismo resultado que el de la temporada anterior.

DC: ¿Expresaron preocupación por las últimas medidas restrictivas?

CC: La medida no es definitiva para todo el verano, sino que se va a ir evaluando la movilidad en los próximos días. Si logramos frenar la curva, la medida es exitosa. De lo contrario, tendrán que aplicarse otras medidas. Son posturas que congeniamos con todos los frentes políticos, y es en base a intentar sostener la temporada con el menor impacto negativo posible. Pero repito, aunque haya medidas antipáticas o que duelan, hay que seguir tomándolas con el fin de poder seguir.

DC: ¿Se puede seguir circulando en las playas después de la 1 de la mañana?

CC: Nosotros no tenemos toque de queda y se puede circular, pero será medida, ya que habrán fuerzas de Seguridad provincial y municipal. Lo que queremos es evitar que se acumulen vecinos. No se puede después de la 1 hacer fiestas ni moverse en masa. Es una temporada irregular y las conductas las tenemos que cambiar, con el fin de que podamos disfrutar lo máximo posible durante el día. Si uno iba al bar a la 1 de la mañana, ahora tendrá que correr el horario y poder ir a las 10 de la noche. Lo que quiero que quede claro es que se puede hacer absolutamente todo, menos ir a bailar a un boliche. Es una temporada de verano con libertades, pero con el condicionante de la situación de pandemia a la que hay que adaptarse.

DC: ¿Hay mucha densidad de jóvenes en la nocturnidad? ¿Tuvieron las mismas complicaciones que Pinamar?

CC: No tenemos restricción horaria de playas, contamos con muchos kilómetros de la misma y es muy difícil acumular 10 mil personas en un lugar. Este destino además es muy familiar, y no vienen tantos jóvenes. Y cuando bajan, lo hacen en las avenidas principales, tanto en San Bernardo como en Santa Teresita y Mar de Ajó. Es ir en contra de nuestra naturaleza querer restringir la playa, porque es nuestro ADN turístico. A la gente siempre le gusta cenar, brindar y luego poder dar un paseo por la playa.

DC: ¿Se dieron fiestas clandestinas?

CC: Por suerte muy poco. Ayer tuvimos el comienzo de una fiesta clandestina que fue desactivada, intentamos llegar antes de que comience para que no se sufran mayores inconvenientes. Muchas veces también los mismos vecinos se encargaron de denunciar por ruidos molestos o por notar irregularidades, así que también indica que hay una conducta clara en nuestro distrito.