Fin de año suele tener un ritmo vertiginoso en Tribunales, más que nada las semanas previas a la feria judicial de enero. Con el año electoral llegando a su fin y un resultado que en los pasillos judiciales fue leído como una señal de que ningún sector (ni oficialismo ni oposición) tiene poder real de daño, quedan algunos fallos pendientes que podrían alterar el rumbo de las causas que le interesan tanto a Cristina Fernández de Kirchner como a Mauricio Macri. Si todo esto no se define, vendrá la sequía de enero y las novedades vendría en febrero.

A Alberto Fernández nunca se le perdonó esa primera “gran” propuesta que cambió parte del régimen de jubilaciones y que forzó a muchos integrantes del Poder Judicial a retirarse, al mismo tiempo que el cambio de escalas llevó a que una parte importante de funcionarios/as viera perjudicado de repente su ingreso. Ese encono no vive solo en Comodoro Py sino que abarca a todo el ámbito tribunalicio: esa batalla, que en términos económicos no pesó, minó también la relación con Marcela Losardo, por entonces ministra de Justicia.

Al respecto de ese lugar, y tras un 2021 que trajo a Martín Soria a Justicia, los canales de diálogo con los sectores más relevantes y con la Corte no atraviesan tampoco un gran momento. En ese contexto, hay un fallo que en el Gobierno esperan para los próximos diez días y que tiene que ver con la composición del Consejo de la Magistratura, el lugar clave que se encarga de definir las ternas de los futuros jueces y las ocasiones en las cuales corresponde una sanción a los actuales magistrados. 

¿Tendrá el presidente de la Corte un lugar en la mesa del Consejo? ¿Serán 16 los integrantes? ¿Le darán un plazo al Congreso para que mande una nueva ley? ¿Bajo qué términos tendrían que hacerlo? Las dudas recorren Tribunales mientras aún el oficialismo no determinó el nombre de la candidata que reemplazará a Elena Highton de Nolasco, que renunció el 1 de noviembre. Según el decreto 222/03, el Gobierno tiene 30 días para proponerla. Si se toman días corridos, el plazo ya terminó. Si se cuentan días hábiles, todavía le queda algo de margen.

De todas formas, los consensos para lograr los dos tercios en el Senado están difíciles. Fernández nunca pudo conseguir que se vote tampoco a Daniel Rafecas a cargo de la Procuración, situación que parece difícil de destrabar.

En el medio de todo esto, en Casación pasan cosas. Primero, porque en los próximos días se definirá quién ocupará la presidencia el año que viene. Tras la polémica por sus visitas a Mauricio Macri, Gustavo Hornos logró pasar por debajo de la ola y llegó a diciembre. Los candidatos a sucederlo son Daniel Petrone y Alejandro Slokar.

Petrone es clave en las causas que involucran a Cristina: fue uno de los que firmó el sobreseimiento en Dólar Futuro e integra la sala que tiene para revisión el expediente Memorándum. También tendrá, apenas llegue el recurso del fiscal, la causa unificada Hotesur-Los Sauces. La duda estaba en si el presidente dejará su lugar en la sala: algunos dicen que si y otros sostienen que, como Casación ya no tiene sus 13 miembros sino que son 12 -por la jubilación de Liliana Catucci-, podría quedarse allí.

Hay quienes explican que si el recurso del fiscal llega antes de la elección de presidente, por mas que Petrone fuera elegido, aún podría intervenir en la causa. Otros consideran que por antigüedad, el lugar le corresponderá a Slokar.  La decisión se conocerá en diez días, en un clima álgido por los conflictos entre jueces, que este año incluyeron hasta una denuncia contra Juan Carlos Gemignani por comentarios misóginos y machistas contra sus colegas.

La gente de Cristina no es la única que mira los movimientos de Casación. Apenas unos días antes del procesamiento que se le dictó a Macri, la Cámara Federal de Mar del Plata habilitó la posibilidad de que la defensa del ex presidente lleve su reclamo de desplazar al juez Martín Bava de la causa de espionaje. Cabe recordar que Casación fue quién sacó la causa por el espionaje que estaba en Lomas de Zamora y la llevó a Py, donde permanece congelada (¿habrá novedades a fin de año?)

Macri apuesta a que la causa, tarde o temprano, llegue a Retiro. Ya recibió un guiño del camarista Martín Irurzun en ese sentido y espera que la sala de Casación que le toque falle en ese mismo sentido.