Cristina Fernández de Kirchner habló tras conocerse la condena a 6 años de prisión que dictó el Tribunal Oral Federal 2, integrado por Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu. Además, en el mismo fallo se sentenció a inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.

“La condena estaba escrita, una causa en la cual un juez como Ercolini se habia declarado incompetente y la envió a Santa Cruz y luego 8 años después con el gobierno de Macri la resucita”, dijo la vicepresidenta para comenzar su defensa.

En este sentido, apuntó: “Esta condena no es por las leyes, esto es producto de un estado paralelo y una mafia, hay un sistema paraestatal donde se decide sobre el patrimonio de la vida del conjunto de los argentinos por afuera del resultado electoral”.

Seguido a esto, hizo mención a la Cadena Nacional que hizo Alberto Fernández este lunes para dar pie a un extenso relato de los chats que fueron filtrados de un supuesto grupo de políticos, judiciales y empresarios de medios que viajaron a Lago Escondido a mediados de octubre. En el viaje se encontraba el propio juez Julán Ercolini, instructor de la causa vialidad.

La vicepresidenta concluyó que “la condena real” es la inhabilitación perpetua a acceder a cargos públicos porque no le perdonan "el modelo económico" del peronismo. En este contexto, recordó su disputa con el Grupo Clarín. Vamos a decir la verdad, Nestor les dio la fusión con Cablevisión, nunca estuve de acuerdo. En mi gobierno querían Telecom, no se los dí, apenas asumió Macri lo tuvieron. Son el poder real, es un sistema disciplinador”, dijo Cristina Kirchner.

"El poder económico y mediático controla en una suerte de Estado paralelo y coarta. Es un sistema disciplinador de la dirigencia política argentina. Me condenan porque condenan un modelo económico. La condena real que dan es la inhabilitación perpetua a acceder a cargos públicos", afirmó la Vicepresidenta a través de sus redes sociales luego de que se conociera el veredicto en la causa Vialidad.

En este punto, la vicepresidenta dejó el título más sobresaliente de toda su alocución. Adelantó que no será candidata “a nada” en 2023 y que se irá del gobierno sin fueros. “Si me quieren meter presa que me metan”, desafió la funcionaria.

“Esta es la verdad, por eso me condenan, esta es la verdad de la milanesa, voy a hacer lo mismo que hice en 2015 cuando Daniel Scioli me pidió que fuera en la lista del peronismo, no le voy a dar el gusto de que diga 'la candidata condenada'", agregó. 

“Terminó igual que vine, el 10 de diciembre me voy a mi casa. Me van a poder meter presa, eso si, siempre y cuando a ningún Caputo de la vida se le ocurra financiar a nadie para que me peguen un tiro”, sentenció.