Horacio Rodríguez Larreta volvió al escenario político porteño con un mensaje directo y cargado de nostalgia, pero también con munición gruesa contra su sucesor. Después de lograr cerca del 8% de los votos en las elecciones legislativas, el exjefe de Gobierno celebró su regreso a la Legislatura con un discurso encendido: "Volví y acá estamos. ¡Volvimos! ¡Volvimos!".

Alejado del PRO, el partido que lo cobijó durante más de dos décadas, Larreta se posicionó desde un nuevo espacio con el que logró tres bancas en la Legislatura. Una de ellas será para él. Las otras dos le permitirán sumar músculo político en el recinto y, sobre todo, volver a tener voz en la ciudad que gobernó durante ocho años.

La votación lo ubicó en el cuarto lugar, por detrás de Manuel Adorni (La Libertad Avanza) con el 30,02%, Leandro Santoro (Ahora Buenos Aires) con el 27,46%, y el propio PRO, que con el 15,89% quedó relegado al tercer puesto, en una elección que marcó un nuevo reordenamiento dentro de la política porteña.

Su primer gesto tras conocerse los resultados fue levantar las manos junto a las orejas, en una pose que muchos asociaron de inmediato con el “Topo Gigio” de Juan Román Riquelme a Mauricio Macri en su etapa como presidente de Boca. Pero ante la pregunta, Rodríguez Larreta evitó la chicana: “Solo quería escuchar a la gente”, respondió sin entrar en polémicas.

X de doble amarilla ⭐️⭐️⭐️

Envalentonado por el resultado, Rodríguez Larreta no tardó en cargar contra la gestión actual de Jorge Macri. “La ciudad está mal. No es lo que era. En cada barrio me lo dijeron: hay suciedad, mugre, y sí, hay olor a pis”, lanzó con ironía, citando una frase que ya había usado durante su campaña.

“Los porteños confirmaron lo que me venían diciendo. Que esta gestión es mala. Que no se trabaja lo que la ciudad necesita: la limpieza, la seguridad, las obras. Y para eso volvimos. Para trabajar por esta maravillosa ciudad de Buenos Aires”, expresó. En ese tono, también pidió una vuelta a lo que definió como “la transformación”: “Para construir esa ciudad del futuro. Esa ciudad que tanto orgullo nos daba”.

El regreso de Larreta no solo marca una reaparición individual sino también una apuesta colectiva por reconstruir un espacio que quedó golpeado tras el giro libertario del electorado porteño. Su mensaje buscó interpelar a una parte del electorado descontenta tanto con el oficialismo libertario como con el PRO: "Volvimos todos juntos con todos los porteños para recuperar esta ciudad”.

Si bien quedó lejos de los principales contendientes, su vuelta a la Legislatura porteña le devuelve protagonismo en un escenario político que lo vio perder terreno desde que se alejó del macrismo, y que ahora lo encuentra decidido a disputar desde adentro.