Cristina Kirchner volvió al centro de la escena política tras un fallo de la Corte Suprema que, según afirmó, busca beneficiar al expresidente Mauricio Macri y su entorno familiar. “Papá Noel no vino en trineo, está en el cuarto piso de la calle Talcahuano”, expresó la exmandataria en una irónica alusión a los jueces que integran el máximo tribunal.

La decisión judicial, que amplía las competencias del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (TSJ) como instancia de revisión en causas nacionales, fue celebrada por las autoridades porteñas como un avance en la autonomía. Sin embargo, para Cristina, el fallo “es inédito, escandaloso e inconstitucional”, y tiene un único propósito: proteger al expresidente y su familia en la causa por el Correo Argentino, en la que el grupo SOCMA enfrenta un millonario reclamo por deudas al Estado.

X de Cristina Kirchner

La presidenta del Partido Justicialista cuestionó que la Corte haya tomado la decisión tras 23 años de proceso judicial, permitiendo que el TSJ porteño, compuesto por jueces designados durante la gestión de Macri, actúe como instancia superior en este caso. “Se privilegia a un único tribunal local para salvar a Macri y su familia de pagar cifras multimillonarias que deben al Estado. Insólito”, expresó en un extenso comunicado publicado en sus redes sociales.

En paralelo, Cristina Kirchner también dedicó párrafos para criticar la situación económica bajo el gobierno de Javier Milei, haciendo referencia a la reciente cesación de pagos anunciada por el grupo agroindustrial Los Grobo. “No es novedoso, pero siempre curioso, que empresas que se llenaron de plata con gobiernos que detestan terminan quebradas con los gobiernos que votan”, lanzó en relación al default de la compañía, que acumula deudas bursátiles por más de 10 millones de dólares.

La exvicepresidenta cuestionó lo que llamó “la economía reprimarizada con sesgo extractivista”, al tiempo que advirtió sobre el alto nivel de endeudamiento en moneda dura y la intervención del dólar por parte del Banco Central. También subrayó los riesgos de apostar exclusivamente a sectores como Vaca Muerta, recordando las fluctuaciones históricas del precio del petróleo.

“No viene mal recordar que en 1998 tuvimos el barril de petróleo a menos de 9 dólares. Néstor era gobernador de Santa Cruz y las cuentas del Estado lo sufrieron”, señaló, apuntando a la fragilidad de basar el desarrollo económico en commodities.

Finalmente, Cristina retomó sus críticas al máximo tribunal, al que acusó de estar “al servicio de los poderosos”, y concluyó con una reflexión que busca instalar una advertencia sobre el futuro del país: “Junto a empresarios que aplauden a sus verdugos y una economía que ya vimos fracasar, nos acercamos peligrosamente a ser un país fallido”.