Un hombre sospechoso de haber sido quien disparó ayer contra un grupo de personas y mató a un niño de 11 años en la ciudad de Rosario fue detenido este mediodía junto a sus dos hijos en una vivienda del barrio Los Pumas, hasta donde se acercó un numeroso grupo de vecinos que atacó el frente de la propiedad a palazos y martillazos tras denunciar que allí funcionaba un búnker narco. 

El episodio se inició cuando vecinos del barrio, entre ellos familiares de Máximo Jerez, el niño asesinado, se acercaron al domicilio de los sospechosos y comenzaron a atacarlo, lo que motivó la intervención de la policía, que disparó con postas de goma para dispersarlos.

El nene murió de al menos un tiro en la espalda y otros tres resultaron heridos luego de ser baleados por un hombre que disparó hacia un grupo de personas que estaban frente a un kiosco, a las 2.30 del domingo.

Según informó la prensa local, el ataque a tiros ocurrió en inmediaciones de Cabal y San José, en el barrio Los Pumitas, cuando un hombre apareció con un arma de fuego y comenzó a disparar contra un grupo de personas que se encontraban en la vereda.

La información indica que los chicos, primos entre sí, salían de un cumpleaños en una casa de la cuadra y estaban en la vereda cuando fueron alcanzados por las balas que comenzó a disparar el desconocido.

Como consecuencia del ataque, un nene de 11 años, que fue llevado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde falleció.

En tanto, de los heridos se informó que una nena de 2 años permanecía en estado reservado con un balazo en el brazo y otros dos chicos de 13 años estaban internados también, uno con un disparo en el pecho- fue operado- y otro en la boca.

Respecto del ataque a al colegio, según informó La Capital, el hecho ocurrió en la noche del domingo en la escuela Nº6.430 "Isabel La Católica", situada en la esquina de Grandoli y Ayolas, en barrio Tablada y los vecinos señalaron que se escucharon más de una decena de tiros.