La crisis interna a nivel nacional del Frente de Todos empieza a hacer mella en las municipalidades oficialistas. El último caso se dio en Berisso, donde el intendente Fabián Cagliardi, que tiene mayoría en el Consejo Deliberante, no pudo aprobar el proyecto "Rendición de Cuentas de 2021" por el desmarque de tres concejales oficialistas y uno del Frente Renovador.

Las fracturas indisimulables de la coalición gobernante empiezan a desordenar a los propios y ya no funcionan como un ente armónico. Incluso los propios intendentes muestran diferencias en la conducción y cada uno se encolumna detrás de su proyecto político.

Uno de los jefes comunales que marcó hace poco tiempo esta diferencia y que hasta pidió por "Cristina 2023" fue Pablo Zurro, de Pehuajó. "El Gobierno nacional tiene que acercarse a Cristina. ¿Cómo no le vas a dar la pelota a Maradona? Ella es la que debe manejar. Lo digo con todo respeto: una cosa es ser presidente y otra líder", lanzó a Data Clave el mes pasado.

Parte de esas diferencias hoy hacen mella en la administración de los jefes comunales. Esto ocurrió el miércoles en Berisso cuando Fabián Cagliardi, intendente de allí, sufrió un revés político de su propio partido y no pudo aprobar la Rendición de Cuentas 2021 que generó tantos cortocircuitos con la oposición.

El intendente era consciente de que el proyecto llegaba al recinto sin el visto bueno de Juntos por el Cambio, que reúne siete concejales, sumado a que el Frente Renovador, con Agustín Celi como único representante, tampoco iba a acompañar.

Tweet de Agustin Celi

Los argumentos de la oposición fueron que contaban con muy poca información y tiempo para poder evaluar la ejecución de las finanzas de la gestión del intendente. Es más, incluso presentaron un amparo para que se evite el tratamiento, teniendo en cuenta que el Frente de Todos, hasta hace poco, contaba con una mayoría propia para poder tratar los temas.

"Tuvimos una sola reunión de Hacienda y los concejales opositores no tenemos accedo a la documentación. El tratamiento de la Rendición fue apresurado y había muchas cuestiones que no estaban documentadas", le dijo en off un concejal opositor a Data Clave.

Sin embargo, algo no funcionó en el engranaje de la coalición oficialista. Tres concejales se desmarcaron de y votaron en contra, ellos son: Alejandro Paulenko, Jorge Suarez y Vanessa Queyffer. Con esto, el resultado quedó con 11 votos negativos y 9 positivos, volteando así la iniciativa de Cagliardi.

Queyffer, una de las que sacudió el tablero oficialista y presidenta del Consejo Deliberante de Berisso, le dijo al medio El Editor Platense: "Todo tiene un limite. El intendente no dialoga, no cree en el consenso y cree que todo tiene que ser por imposición como si fuera una empresa y esto no es una empresa".

Lo curioso es que la fractura se da en un distrito que proviene de un riñón en el que se buscan promover mensajes de unidad. Cagliardi logró posicionarse en Berisso luego de un importante impulso político de Mario Secco, el intendente de Ensenada que puso su tierra a disposición para disimular lo que fue la primera fractura nacional del Frente de Todos.

En ese distrito hubo una foto icónica que se la terminó diluyendo el tiempo, que fue una foto de Alberto Fernández junto a Cristina Kirchner, secundados por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. Fue cuando se empezaron a dar los primeros cruces entre el kirchnerismo y el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien amenazó con dar un portazo si no se corría de su cargo al subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, con quien todavía mantiene fuertes diferencias por la actualización en los precios de las tarifas eléctricas.

Fernández: “Grábense esta foto; es la foto de nuestra unidad y nadie va a hacernos ceder en eso”

"Saquen esta foto y no se olviden nunca, porque aquí estamos los que estamos convencidos de lo que hay que hacer en Argentina", había expresado el presidente Fernández junto a la vicepresidenta de la Nación. La foto, en el contexto de hoy, quedó como una imagen de recuerdo de la unidad que alguna vez fue y que ahora mira crecer las flores desde abajo, como dice una gran frase de los Redonditos de Ricota en la canción "Etiqueta Negra".