La confirmación de Sergio Massa como superministro no solo provocó una serie de movimientos directos a nivel nacional sino que, además, reconfirmó algunas alianzas previas que ya venían funcionando bien y que seguirán profundizándose en la Provincia.

En concreto, pese a que tomó la decisión de no hacer declaraciones públicas, al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, la designación de Massa en el gabinete nacional le permitirá seguir enfocado en el proyecto de gestión actual con el objetivo de revalidar su mandato en las elecciones de 2023.

Sucede que, con su llegada, Massa barrió con dos proyectos concretos: el de Daniel Scioli por la presidencia y el de Julián Domínguez por la gobernación bonaerense. Pese a que el embajador de Brasil es el primer soldado de la causa que sea necesaria, su arribo había despertado varias líneas internas del Frente de Todos que siempre se mostraron distantes con el gobernador.

El ejemplo más claro, Mar del Plata; donde el director nacional del Correo Argentino, Rodolfo “Manino” Iriart, ya había empezado a moverse en su nombre ilusionado con la idea nacional del exmotonauta. Lo de Domínguez, claro, era un poco más complejo. La situación actual con el campo, no ayudaba. Más con el antecedente de 2015, cuando muchos lo acusaron de ser el responsable principal de la derrota del peronismo a manos de María Eugenia Vidal por el famoso fuego amigo en contra de Aníbal Fernández.

Es por esto que el ascenso de Massa tiene un impacto directo en la Provincia donde, se sabe, el líder del Frente Renovador alberga su voto más fuerte. Y, donde también, varios intendentes massistas ya se mostraron a favor de la continuidad de Kicillof en la Provincia.

Justamente el denominado “Grupo de los 11”, que alberga a los jefes comunales del FdT en la quinta sección electoral, ya se pronunció en favor del arribo de Massa. Se trata del mismo conjunto de alcaldes que le había dado la venia al gobernador en una clara señal del apoyo del Frente Renovador a la reelección de Axel en la Provincia. Si bien Axel no oficializó su candidatura hay que darle continuidad a este proyecto político más allá del 2023 porque viene dando vuelta la Provincia. Hoy los 135 distritos están con mucha obra pública de parte del gobierno bonaerense”, le dijo en su momento a Data Clave el intendente massista de Chascomús, Javier Gastón.

Lo cierto es que hay dos realidades concretas. El Frente Renovador viene trabajando firme en el ámbito legislativo en favor de los proyectos del gobernador. Y, más allá de algún tironeo interno por no ser consultados en un par de designaciones, se sabe que el apoyo es total.

No cambiamos nunca lo que venimos diciendo desde hace más de un año. Sergio, presidente; Axel, gobernador”, le dice a este medio un importante dirigente del Frente Renovador.

La otra verdad es que el Frente Renovador no cuenta con un candidato de peso para salir a dar la pelea en Buenos Aires. De hecho, el mejor candidato siempre fue Massa. Pero el ahora superministro nunca aceptó la idea de pelear por la Provincia, con el antecedente directo del que gobierno en Buenos Aires no gana en Nación. Y el objetivo del funcionario nacional es claro.

Con el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, y el ministro de Infraestructura, Leo Nardini, posicionados en favor de la llegada de Massa al gobierno nacional hubo también un mensaje más amplio. Y es que, el sector de los intendentes que hoy convive en alianza con el diputado nacional y líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, dio el visto bueno. Y, como se sabe, el massismo devuelve las paredes.

Ahora resta saber cuáles serán las primeras declaraciones cruzadas entre ambos dirigentes de cara a lo que serán estos primeros meses de cara al escenario 2023.