La provincia de Buenos Aires anunció este lunes por la tarde que “da inicio a una nueva etapa de la presencialidad cuidada en todas sus instituciones educativas a partir del 1º de septiembre”. La vuelta a las aulas se da tras el acuerdo alcanzado por todos los ministros del país en el Consejo Federal de Educación y la firma de un nuevo protocolo que reduce la distancia mínima entre alumnos.

“Con el objetivo de avanzar hacia la presencialidad cuidada plena del conjunto de estudiantes de cada curso durante su jornada habitual, se actualizan las medidas de cuidado relativas al distanciamiento social de referencia dentro del aula”, informó el gobierno provincial en un comunicado de prensa.

En concreto, el distanciamiento social de referencia dentro del aula pasará de 1,5 metros a 90 centímetros. “En los casos excepcionales donde no se pueda cumplir con la distancia de referencia se procurará mantener siempre la máxima distancia posible entre estudiantes debiendo respetarse en todos los casos un aforo de 1 metro cuadrado por persona y se reforzarán las medidas de cuidado a partir de una estrategia de vigilancia epidemiológica”, informaron. 

En los establecimientos educativos donde no se pueda brindar más de 90 centímetros de distancia se deberán “mantener la adecuada ventilación de las aulas, para lo cual será fundamental el uso de medidores de dióxido de carbono”.

Por otro lado, en todas las escuelas bonaerenses se mantienen las medidas establecidas por el Plan Jurisdiccional para el regreso seguro a las clases presenciales de manera que  “continúa siendo obligatorio el uso de tapabocas por parte de la comunidad educativa durante toda la jornada”.

Por último, el gobierno provincial aseguró que el acuerdo en el Consejo Federal se hizo bajo recomendación de especialistas y se da gracias a la situación epidemiológica de la actualidad.