En su afán por achicar el Estado y ajuste el gasto público, el Gobierno disolvió hoy dos fondos que estaban destinados a la promoción de las actividades científicas y a la urbanización de los barrios más pobres.

La medida que tomó el Ministerio de Economía dispone la disolución del Fondo Fiduciario para la Promoción Científica y Tecnológica (FONDOTEC) y del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), con el argumento de que se detectaron irregularidades en las auditorías llevadas a cabo por la Sindicatura General de la Nación (SIGEN).

La medida, que había sido anticipada por el vocero presidencial Manuel Adorni el lunes, fue confirmada mediante el Decreto 312/2025 publicado en el Boletín Oficial, con la firma del presidente, Javier Milei, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Economía, Luis Caputo.

En relación al FONDOTEC, la cartera económica precisó que la auditoría “reveló graves falencias de gestión: ausencia de reglamentos operativos; falta de criterios claros de evaluación y asignación de recursos; deficiencias contables; y una administración financiera ineficiente, entre otras irregularidades”.

En la misma línea, expuso que “durante los años 2022 y 2023, este Fondo recibió ingresos por más de $28 mil millones, pero sólo desembolsó $33 millones” y agregó que “no existen indicadores de monitoreo que permitan evaluar su impacto, lo cual impide justificar su continuidad”.

Con respecto al FISU, detalló que la auditoría también “detectó múltiples irregularidades, como contrataciones sin procesos adecuados; asignación de obras a cooperativas sin antecedentes; compra de terrenos contaminados; demoras significativas; y falta de monitoreo efectivo, entre otras”.

A su vez, recordó que “el Decreto N° 193/2024 ya había reducido al 1% la asignación de recursos del Impuesto País al FISU, tributo que, además, perdió vigencia en diciembre de 2024”, indicando que “la falta de resultados concretos y el mal uso de fondos públicos llevaron hoy a su definitiva disolución”.

A pesar de consumar el cierre del mencionado fondo fiduciario, el ministerio encabezado por Caputo aseguró que “la Subsecretaría de Integración Socio Urbana (SISU), área que tenía entre sus atribuciones la administración del FISU, contará con una partida presupuestaria destinada puntualmente a continuar en forma transparente las obras correspondientes”.

Al argumentar la eliminación de ambos fondos fiduciarios, sostuvo que “registraban un pésimo uso de los recursos de la sociedad, falta de controles y de resultados”, por lo que se imponía como una decisión necesaria para “garantizar el uso eficiente de los recursos públicos”.

Desde Economía, remarcaron que “con estos cierres, ya son 24 los Fondos Fiduciarios disueltos por tener deficiencias identificadas en la gestión de sus instrumentos financieros y por debilidades para velar por un uso transparente y eficiente de los recursos públicos, alejándose de los estándares requeridos para una administración responsable”.

Origen y función de los fondos

El Fondo Fiduciario para la Promoción Científica y Tecnológica fue constituido en el marco de la Ley N° 23.877 de 1990, para “financiar proyectos de investigación y desarrollo, la transmisión de tecnología, la asistencia técnica y todos aquellos hechos innovadores que redunden en lograr un mayor bienestar del pueblo y la grandeza de la Nación, jerarquizando socialmente la tarea del científico, del tecnólogo y del empresario innovador”.

El Fondo de Integración Socio Urbana, por su parte, fue creado por el Decreto N° 819/2019 para promover la urbanización de barrios populares

Uno de los argumentos del oficialismo es que la mayor parte de las obras del FISU estaban manejadas por dirigentes allegados a Juan Grabois, pero las auditorías no detectaron malversación de fondos o sobreprecios.

El fondo se conformaba con un porcentaje del aporte de las grandes fortunas, así como una parte del impuesto a la compra de dólares, para ejecutar obras de integración de los barrios populares, que ahora se paralizan.

“Nosotros estamos muy tranquilos y tranquilas. Es claro que hay una campaña para desacreditar el trabajo que realizamos, una campaña que apunta sobre todo a pegarle a Juan Grabois como impulsor de una secretaria de Estado villera, como lo fui yo", dijo en su momento Fernanda Miño, extitular de la Secretaría de Integración Sociourbana, que administraba las obras del FISU.