Tras el arribo y posterior retenimiento del Boeing 747 Dreamliner de la empresa venezolana Emtrasur, con una tripulación iraní al mando, la oposición acusó al gobierno de ser cómplice de la maniobra por sus "lineamientos" con Venezuela.

En un acto realizado este martes, el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta aseguró que "lo del avión es una vergüenza, una muestra más de inoperancia del Gobierno y una contradicción más de lo que es la política exterior del Gobierno". 

En ese marco, añadió que "la semana pasada, el Presidente en EEUU, defendiendo a Venezuela, a Nicaragua, a Cuba. Maduro le agradeció. Realmente es una vergüenza" y denunció que "ninguno de los sistemas de seguridad y alarmas funcionaron". 

"Realmente cruzaron todos los límites, esperemos que la Justicia actúe rápido y a fondo. Tenemos que cuidar a todos los argentinos y, en este caso, han demostrado que no lo han hecho", agregó el funcionario porteño. 

En la misma línea, la presidenta del PRO Patricia Bullrich se pronunció en contra de las explicaciones brindadas por el gobierno: "me pareció de una explicación de jardín de infantes. Se trata de un avión que viene con una tripulación iraní, con un capitán del Ministerio de Inteligencia de Irán, con el resto de la tripulación que habrá que ver qué relación tiene con las guardias revolucionarias, en una compañía que está inhabilitada por estar en las listas terrorista en Estados Unidos". 

En declaraciones a Radio Rivadavia, la ex Ministra de Seguridad dijo que "nosotros nos enteramos el martes, y el Gobierno el viernes y no hizo nada hasta ayer. La palabra es complicidad, y el ministro de Seguridad deberá explicar a fondo". 

Bullrich denunció que el gobierno omitió las alertas de los países limítrofes, ya que la aeronave contaba con una alerta notificada por el ministro del Interior de Paraguay, Federico González, y con la negativa de acceso de Uruguay.

"Después de todo ese intercambio de información, el ministro de Seguridad de la Argentina se entera recién el viernes, cuando nosotros nos enteramos el pasado martes, y después dan una explicación diciendo que podrían ser instructores de vuelo. La verdad es que me parece poco serio para alguien que ha comenzado una tarea en un organismo tan importante que sirve para proteger a los argentinos", agregó Bullrich. 

Concluyó en que "es parte de una política de carácter  de alineamiento que tiene la Argentina, porque no puedo creer que sea un desconocimiento cuando sonaron todas las alertas".