La interna de Juntos por el Cambio a nivel nacional tiene su correlato en todo el país, aunque con las particularidades de cada jurisdicción. En efecto, mientras ya están lanzados candidatos de las distintas fuerzas de la alianza opositora a lo largo y ancho de la Argentina, hay una provincia con un claro desbalance. El dato es que se trata ni más ni menos de que la que ostenta el 40% del padrón electoral, Buenos Aires.

Allí, el PRO está decidido a imponerse, con varios candidatos desde hace meses. Tiene múltiples opciones confirmadas de manera oficial. Hasta hace poco eran 4 confirmadas (Diego Santilli, Cristian Ritondo, Javier Iguacel y Joaquín de la Torre) y el miércoles se blanqueó lo que era una carrera tácita: Néstor Grindetti también será de la partida. 

De esta manera, el partido amarillo tiene un amplio abanico de posibilidades, todas ellas con peso específico y una combinación de chapa y territorio. Además, todos ellos tienen el apoyo de al menos un referente nacional: Larreta respalda a Santilli, Macri a Grindetti, Vidal a Ritondo y Bullrich acompaña a Iguacel y De la Torre. Mientras espera la definición sobre si habrá PASO o no, robustece su armado y hoy tiene una clara ventaja sobre sus socios en el espacio opositor.

“Todo se va a terminar dirimiendo en marzo del año que viene con las encuestas en la mano. Ver qué construye cada uno de los candidatos para esa fecha, para que quede una oferta electoral menor”, confió un dirigente del PRO del conurbano a Data Clave.

Y remarcó: “También dependerá mucho de si hay o no una interna a nivel nacional del PRO. Si hay un solo candidato arriba, habrá uno solo abajo. Si hay una puja entre dos, Horacio o Patricia, por ejemplo, cada uno va a tener su propia línea en la provincia”.

El PRO suma y la UCR ¿resta?: los amarillos arrinconan a los radicales en provincia de Buenos Aires

"La provincia está dada vuelta como una media y hay que trabajar en la autonomía provincial, y hay que darle más juego a los intendentes", aseguró Grindetti en diálogo con FM Delta este jueves. Y aclaró: "Hace años que estoy al lado de Mauricio Macri y compartimos ciertos valores. Patricia Bullrich está muy cerca de eso, coincidimos en muchas cosas, especialmente en cómo afrontar los primeros momentos de gobierno si ganamos el año que viene".

En este sentido, la campaña alternará movidas individuales y conjuntas. “Cada uno tiene su singularidad y eso no se va a perder. Grindetti tiene marcada su propia agenda y en algunos casos se va a juntar, como pasó ayer con Ritondo o en Las Heras hace una semana con Iguacel y de La Torre. Habrá agenda individual y compartida”, confiaron desde las filas de Grindetti a este medio tras el acto en Lanús.

Respecto de lo que pueda pasar el año que viene, un dirigente del AMBA fue categórico: “En marzo, el que esté mejor irá y los demás acompañarán. El PRO siempre se puso de acuerdo, desde hace 20 años. Y eso no va a cambiar ahora”. 

No sabe, no contesta: indefinición que preocupa en el radicalismo

A poco menos de un año para las elecciones provinciales del 2023, la Unión Cívica Radical no tiene un candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires. Hay algunos nombres dando vueltas, pero ninguno lanzado ni de recorridas. Martín Tetaz, Maximiliano Abad, son dos que sonaron pero ninguno con el peso suficiente en el electorado. El economista tiene algún nivel más de conocimiento en la sociedad, pero no es del sector que hoy conduce la UCR. 

“Hasta que no se defina la interna, no habrá novedades sobre las candidaturas de la UCR de cara a las elecciones del año que viene”, señaló a este medio una voz más que autorizada entre los correligionarios bonaerenses. Y la resolución de la reyerta doméstica es recién el 13 de noviembre. Si bien hubo acuerdo a nivel provincial para la conducción Abad-Revilla, en muchos distritos clave hay una batalla feroz. Hasta tanto se resuelva, se mantiene el misterio.

“Estamos perdiendo tiempo. Los medios nacionales exponen las actividades de los candidatos del PRO y así se le da forma los candidatos del PRO como si fueran los únicos de Juntos”, le decía en septiembre un intendente radical a Data Clave. Dos meses después, nada ha cambiado. O sí: no pocos jefes comunales empujan por el Plan M, Facundo Manes a provincia.

La jugada resolvería de un plumazo dos problemas del radicalismo: se terminaría la disputa con Gerardo Morales a nivel nacional y solucionaría la falta de peso específico en PBA. Pero desde las filas que impulsaron la candidatura del neurocientífico en 2021 al Congreso, no están convencidos de este paso. Tampoco el propio Manes, que en cada oportunidad remarca que será candidato a la Rosada. 

Lo cierto es que el partido centenario no tiene mucho más para ofrecer en territorio bonaerense, donde el otro nombre fuerte es Gustavo Posse, quien no tiene sintonía fina con la conducción provincial y es mirado con recelo por otros dirigentes. Así las cosas,