El ministro de Economía local, Carlos Sadir, se impuso ayer en las elecciones desarrolladas en Jujuy y será el nuevo gobernador de la provincia del norte argentino. Al cierre de esta edición, ya entrada la medianoche, el mandatario electo cosechaba casi el 50 por ciento de los votos con casi más del 40 por ciento del padrón escrutado.

Sin embargo, quien capitalizó la victoria fue el gobernador saliente, Gerardo Morales. El dirigente radical se llevó todos los flashes debido a que el resultado de esta elección potencia sus deseos presidencialistas

El triunfo local también dejó a la vista las claras diferencias que viven hoy dentro de Juntos. A Jujuy viajaron dirigentes de la UCR alineados al mandatario provincial como Martín Lousteau, Mario Negri, Emiliano Yacobitti, Gustavo Posse, Walter Carusso y José Cano. Una línea interna del radicalismo que comulga con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien también dijo presente en el bunker local.

Pasadas las 22.30 todos salieron al escenario principal para celebrar una victoria que ya había tenido su brindis previo tras bambalinas. "Es un resultado electoral tremendo", comenzó diciendo Morales. Vale mencionar que la expectativa local era aventajar al segundo por 20 puntos. La distancia a las 0.10 era de 27 puntos. Y añadió: “El pueblo jujeño ratificó el cambió. No va a ser lo mismo que en 2015. Jujuy recuperó la paz y acá está presa la corrupción”, manifestó, como suele hacerlo, sin nombrar a la destinataria de la frase: Milagro Sala.

Cabe recordar que Morales también logró darle un fuerte envión a su delfín al sumarse a la boleta como candidato a convencional constituyente con el fin de ser partícipe de lo que será la reforma de Carta Magna que incluye entre otras ítems la prohibición a la reelección indefinida, los cortes de ruta y el indulto. 

Por su parte, Larreta dejó en claro que “este es un triunfo del trabajo. Un reconocimiento para Gerardo Morales porque podemos vivir en una Argentina en paz. Es un triunfo del orden y del desarrollo”. Y agregó: "Una victoria de Juntos por el Cambio que demuestra que la gente quiere un cambio y lo vamos a lograr en todas las provincias".

Por su parte, el peronismo dio una pequeña sorpresa dentro de lo que fue una mala elección. Sucede que, pese a que se especulaba con la idea de que la izquierda podría tomar el segundo lugar, el Frente Justicialista, con Rubén Rivarola a la cabeza, alcanzó poco más del 20 por ciento de los votos y se consolidó no solo como la principal oposición sino como el líder del PJ local ya que las otras dos listas con aspirantes peronistas sumaron entre ambas un 10 por ciento.

Quien justamente no pudo sostener la gran elección realizada en 2021 fue el diputado Alejandro Vilca que alcanzó la mitad de los votos obtenidos en las intermedias y sumó un 13.7 por ciento. El Frente de Izquierda-Unidad denunció desde temprano que hubo fraude. La legisladora Myriam Bregman viajó a San Salvador para evidenciar esta situación y respaldar a su compañero de banca en la Cámara baja del Congreso.