En una jornada de cruces, cuestionan el rol de Macri como armador de estrategias del PRO: "no para de perder"
Sucumbió ante Alberto Fernández en 2019, cuando buscaba su reelección. Y en 2023 se equivocó en la interna del PRO. Qué dijo Durán Barba y cuáles podrían ser los primeros dirigentes que salten a La Libertad Avanza.
El gran derrotado en las elecciones de la ciudad de Buenos Aires de este domingo 18 fue Mauricio Macri. El expresidente de Boca Juniors, el exjefe de Gobierno porteño y el expresidente de la Nación viene sumando una derrota tras otra, pero se resiste a creer que su momento ya fue.
“Quizás Macri deba entender que su momento pasó”, dijo esta mañana el presidente Javier Milei, tras la victoria de su pupilo Manuel Adorni. El mandatario de ultraderecha le arrebató a Macri la bandera del antiperonismo, con su postura más extrema.
Desde la popularidad que logró con la presidencia de Boca, Macri construyó una carrera política que llegó a lo más alto en 2015, cuando se convirtió en presidente y derrotó a Daniel Scioli, que fue entonces en representación del peronismo y hoy se abraza con Milei.
Ya en 2019, Macri mordió el polvo de la derrota. Alberto Fernández volvió a llevar al peronismo al poder en la fórmula que encabezó junto a Cristina Kirchner, otra dirigente que se resiste a disfrutar del tiempo libre. Y desde entonces el ex presidente viene en caída libre.
El empresario no consiguió en 2019 la reelección. Y entonces no entendió que su tiempo había pasado. Ya en la siguiente elección presidencial, en 2023, hizo una serie de movimientos en la interna del PRO que terminaron con la inesperada victoria del panelista televisivo.
En ese momento, Macri apostó por Patricia Bullrich en la interna del PRO. Y la actual ministra de Milei le ganó a Horacio Rodríguez Larreta, el entonces jefe de Gobierno que anoche fue elegido legislador. Macri pensó entonces que Bullrich le ganaría a Sergio Massa, el candidato del peronismo. Pero a sorpresa la dio Milei, que en la segunda vuelta le ganó al fundador del Frente Renovador.
Bullrich fue una de las primeras en abandonar el rejunte de Juntos por el Cambio y se sumó al gobierno de ultraderecha. Rodríguez Larreta también abandonó el PRO y el domingo se presentó con otro sello.
El PRO sufrió la primera derrota contundente el domingo 18 en el distrito que lo vio nacer. En la previa, Macri apostó por Silvia Lospennato, la impulsora del proyecto de Ficha Limpia. Pero ahí también perdió, ya que no consiguió las votos necesarios en el Senado.
Desorientado por el revés legislativo, Macri le pegó a Milei y dijo que en la ciudad se corría el riesgo de que ganara el kirchnerismo. No pasó. Manuel Adorni le ganó a Leandro Santoro, que soñaba con una victoria, y la candidata de Macri quedó tercera, lejos.
El consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba, quien asesoró a Macri cuando llegó a la presidencia, consideró que Macri es el principal responsable de la debacle. “Se equivocó totalmente desde la derrota (en 2023), ha conseguido quedarse solo”, dijo el analista.
En declaraciones a Perfil, consideró: "Están afuera todos los radicales, los lilitos, Larreta... consiguió quedarse solo y adhiriendo a unas ideas que si son las correctas son las de La Libertad Avanza. Entonces, más bien que se afilian a La Libertad Avanza".
Entre el amarillo y el violeta no hay mucha diferencia. Sólo la intensidad de los colores. Así lo entienden Diego Santilli y Cristian Ritondo, dirigentes del PRO más cercanos a LLA y que podrían ser los próximos en irse tras la gloria mileista.