Encuesta vs. territorio: acuerdo entre LLA y PRO se empantana por guerra de cartelera y crecen los roces
Desde ambos espacios entienden la necesidad de aunar fuerzas. Sin embargo, la discusión por cómo sería el armado de las listas dificulta su ejecución y expone las diferencias. Otra foto entre Pareja y Ritondo. El factor CABA y el rol de Macri
La oposición bonaerense no encuentra, por estas horas, un punto de unidad para salir a disputarle la Provincia al gobernador Axel Kicillof. La dirigencia de La Libertad Avanza y del PRO ven con claridad la necesidad de aunar fuerzas para emparejar la puja en el oficialismo. Sin embargo, la guerra de cartelera hoy no permite dar con un punto de encuentro y terminar de sellar el acuerdo.
La discusión interna pasa por lo que aporta cada uno de los espacios y cuál es la ganancia política que esto les significará. Desde La Libertad Avanza tienen en claro que hoy son la principal marca opositora a partir de lo que muestran las encuestas en relación al plano nacional. Sin embargo, en política nada es lineal. Y más allá de los diferentes armados seccionales que viene generando el principal referente libertario, Sebastían Pareja, lo cierto es que todavía no encuentra nombres de peso para encabezar las listas.
El PRO entiende el juego. Y sabe que para ser competitivos no alcanza con unir ambos espacios. La decisión de quién se pone al frente de cada lista es elemental. Y es ahí donde busca sacar chapa interna contra un espacio que sin Javier Milei en la boleta pierde peso.
El partido amarillo quiere imponer el músculo territorial. En los hechos, maneja más de 12 distritos en PBA y cuenta con dirigentes de mayor reconocimiento territorial. LLA, por su parte, tiene solo 3 municipios que incorporó gracias a la llegada de Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Fernanda Astorino (Capitán Sarmiento) y Ramiro Egüen (Veinticinco de Mayo). Hoy por hoy no parece suficiente. Al menos, eso es lo que aseguran desde el partido amarillo.
Pese a la reunión de este martes entre Pareja y el presidente del PRO bonaerense, Cristian Ritondo, la idea de un pacto no termina de cerrar. La foto tiene como objetivo generar otra presión para el expresidente Mauricio Macri, quien no cede en su deseo de manejar las discusiones.
Desde ambos sectores aseguran tener acuerdos avanzados en más de 25 distritos. Lo que no dicen es que son más de 100 en los que todavía no pudieron dar un paso concreto.
“El acuerdo es necesario para los dos, pero sigue verde. Nosotros no podemos entregar un armado consolidado. En la gran mayoría de distritos, La Libertad Avanza tiene un concejal o ninguno", le cuenta a Data Clave un jefe comunal del PRO. Y agrega: “Está claro que nos conviene unirnos y que ellos siguen de moda, pero los acuerdos no siempre tienen que ser equitativos”.
Para colmo, en las últimas horas, el diputado nacional José Luis Espert volvió a levantar el perfil con el claro objetivo de ser protagonista interno. "En la provincia de Buenos Aires tenemos que juntarnos todos aquellos que seamos antikirchneristas”, señaló el diputado en diálogo con CNN Radio. Y agregó: “Por supuesto queremos que el PRO y todos aquellos que quieren una provincia que no sea una villa miseria como es hoy estemos todos juntos”.
El problema que tiene Espert es que desde el PRO no quieren saber nada con que encabece ninguna lista. Ni en las elecciones provinciales ni tampoco en las nacionales. El vínculo, más allá de estar quebrado, tiene otro interés: subir a ese lugar al también diputado Diego Santilli.
Sobre esto, desde LLA también tienen algo para decir. “Santilli perdió la interna de un PRO que después terminó tercero y revivió por unos días al radicalismo en 2021 con Manes. Tienen que ser más serios. Nos estamos jugando una oportunidad clara y no podemos desaprovecharla”, le dijo a este medio un dirigente bonaerense LLA.
Discusión interna
Pero la puja entre unos y otros no termina ahí. Como es sabido, Macri quiere tener el control de las negociaciones con LLA. El actual titular del PRO entiende que el acuerdo debe ser macro y que eso implica ganar presencia en algunos lugares de poder nacional. Y es por esto que mantiene una diferencia interna con aquellos que hoy buscan ceder el sello PRO con tal de subirse a la locomotora libertaria.
Para colmo, Pareja leyó la jugada y se volcó a generar mayor roce interno con el fin de que los dirigentes PRO no dependan de Macri. "Cuál es el inconveniente que me ponga de acuerdo con Santilli y Ritondo sin escuchar lo que dice Macri, no lo entiendo", dijo una semana atrás.
Y fue por más: “Macri hace rato que no tiene razón. Cuando ganamos en el ballotage, me junté con la mesa política y di una sola indicación que era no ir a caranchear en el PRO y sectores del radicalismo, dejar que el proceso decante naturalmente. En ese momento no había que comprarlos, estaban regalados y no los fuimos a buscar, dejamos las puertas abiertas”.
La pelea en CABA no suma. Y es por eso que Macri elige la distancia: no quiere generar confusiones ni restarle votos a su primo Jorge. Y en sus planes está esperar hasta ver qué arrojan los resultados porteños para poder subirse o bajarse a tiempo de una alianza que navega según para donde va la corriente.