El 22 de septiembre de 2022, alrededor de las 4 de la madrugada, se produjo una explosión en la refinería de la empresa New American Oil S.A, ubicada en el Parque Industrial de Plaza Huincul. Allí estaban trabajando los operarios Víctor Herrera, Gonzalo Molina y Fernando Jara, junto a Juan Pablo Narambuena, de la empresa encargada de la seguridad del lugar.

La onda expansiva y el fuego generó la muerte de los operarios Herrera, Molina y Jara, que se encontraban trabajando y quienes se conducían a la sala de bombas donde se encontraba una artesanal y precaria red contra incendios, "quedando atrapados en la bola de fuego producida al quemarse la masa de vapores emitidas, afectando además las  instalaciones propias y linderas a la refinería, las cuales fueron envueltas por las llamas y los altos niveles de radiación térmica”.

Tras una larga investigación, la fiscal jefa Sandra González Taboada y la fiscal del caso Ana Mathiue imputaron a siete personas que cumplían distintas funciones en la empresa NAO al momento de la explosión, y a un auditor externo de la firma Herting.

Se les atribuyeron los delitos de estrago -doloso y culposo-, y el juez de garantías avaló la formulación de cargos. La representante del Ministerio Pública Fiscal neuquino precisó que “las víctimas fallecieron producto de la exposición de sus tejidos a elevadas temperaturas – tanto externa como internamente por inhalación –concomitante con humos y productos liberados por la acción del fuego que provoca injuria térmica y asfixia”. 

La refinería se dedica a la producción de distintos derivados de hidrocarburos,  siendo uno de éstos, el llamado RECON (Petróleo Reconstruido), producto que se obtiene mediante la formulación y/o mezcla de distintos líquidos combustibles y/o inflamables, el cual no tenía un procedimiento estandarizado ni uniforme, explicó la fiscal jefa.            

Para la Fiscalía, "el evento acontece como consecuencia directa de un sin números de incumplimientos a mandas legales impuestas por la especificidad; y a falencias de funcionamiento de diversos equipos como también a la carencia de equipos e instalaciones, dando sustento a los acontecimientos que, en su conjunto, desencadenaron el siniestro accidental y previsible que terminó con la vida de tres trabajadores”.