Vecinos de la localidad bonaerense de Rojas y otras ciudades cercanas marcharon esta tarde para pedir justicia por el femicidio de Úrsula Bahillo, la joven de 18 años asesinada a puñaladas, presuntamente, por su exnovio policía, mientras la madre de la víctima estaba reunida con el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni.

La movilización comenzó a las 17 en la plaza principal de Rojas y se desarrolló de manera pacífica, hasta que alrededor de las 20 un grupo de asistentes persiguieron, acorralaron y golpearon a dos hombres que había increpado a los manifestantes.

El hecho no está muy claro. Los señores llegaron al lugar cuando la movilización estaba por concluir y comenzaron a discutir con los vecinos que todavía seguían en la marcha. Hubo gritos, insultos cruzados y piedrazos.

El trágico episodio derivó en masivas movilizaciones contra la comisaría local que derivó en una grave represión por parte de las fuerzas de Seguridad anoche.

Durante los incidentes una chica recibió un balazo de goma en la cara que la pudo haber matado. Nerina, la joven que sufrió ese disparo mientras estaba protestando ayer frente a la seccional, dijo a la prensa que casi sufrió la pérdida del ojo.

"La saqué barata, por cinco centímetros más me sacaban el ojo. No quise lastimar a nadie, solamente pararme para pedir justicia", añadió la chica, cuyo ataque fue grabado por un celular de otra persona.

"Estaba parada, no buscaba pelea, no buscaba romper nada, solamente estar parada, cruzada de brazos, que ella vea que estaba ahí luchando, porque ella lo gritaba y nadie pudo ayudarla", expresó.

En tanto, otra mujer reclamó contra el intendente Claudio Rossi para que "dé la cara" porque en la ciudad "no hay seguridad". "Siento bronca, dolor, impotencia, Úrsula hizo once denuncias, se cansó de pedir ayuda y acá estamos", expresó otra vecina.

El fiscal del caso confirmó que se trata de un femicidio con “alevosía y premeditación”. La madre de Úrsula reclamó por la presencia del ministro de Seguridad, Sergio Berni, que viajó desde Miramar y se reunió con ella en su casa. 

"El femicidio es un tema que en la Argentina tenemos que rever, porque tenemos las mejores legislaciones, más modernas y sin embargo los resultados no son los mejores, eso quiere decir que están fallando situaciones que estamos estudiando", dijo a la prensa Berni luego de salir de la casa de Patricia.

El titular de la cartera de Seguridad de la provincia de Buenos Aires expresó que "la Justicia debe abordar" la problemática de los femicidios "de otra forma", ya que consideró que "hay una mirada equivocada de cómo entender esta situación".

Respecto al femicida, Berni señaló que "no estaba cumpliendo ninguna función, estaba apartado, no tenía su arma reglamentaria, no estaba trabajando, estaba con una carpeta psiquiátrica".

"Ante una carpeta psiquiátrica después aparecen las inimputabilidades, o sea que aduciendo que estaba en un estado psiquiátrico no sabía lo que hacía", dijo el ministro y agregó que harán todo lo que tengan "que hacer" para colaborar en la causa.

Por su parte, el fiscal Sergio Terrón, que investiga el femicidio, aseguró que “de acuerdo a los elementos que viene colectando en el expediente todo indica que se trata de un femicidio con alevosía y premeditación´”, y afirmó, a la agencia Télam, que “existían denuncias previas por violencia de género de la propia víctima y de, al menos, otra mujer”.

"Estamos investigando cómo, pero creemos que a través de algún engaño o por la fuerza, la llevó en su propio auto hasta ese paraje, en Guido Spano, para cometer el crimen", describió Terrón, respecto al crimen.

Patricia, en parte, detalló que Matías Ezequiel Martínez (25), el policía imputado, ya había recibido al menos 18 denuncias en esta línea y que, en más de una ocasión, había quebrado las ordenes perimetrales que regían sobre Martínez.