El presidente Alberto Fernández cerró este miércoles su primera visita de Estado desde que asumió en 2019. Fue en Chile y, según el mandatario, fue un éxito, en términos de los acuerdos y negociaciones abordadas con su par Sebastián Piñera. No obstante, este miércoles hubo lugar para la polémica. 

El canciller de Chile, Andrés Allamand, aseguró que ambos presidentes acordaron avanzar “en una estrategia común como uno de los elementos fundamentales de la necesidad de que exista una salida política”. Antes, precisó que “de aquí a algunas semanas se va a conformar, por así decirlo, un frente común donde las distintas instancias que tienen preocupación por el proceso de transición en Venezuela vayan convergiendo en una estrategia común”.

Más tarde, en la conferencia de prensa que encabezó Fernández, el argentino negó que la cuestión Venezuela haya formado parte del diálogo con Piñera: “Honestamente no sé qué dijo el canciller Allamand, lo que sí puedo decirle es que no abordamos ese tema con el presidente Piñera”. Fernández intentó ser protocolar, para no dejar en “off side” al canciller de Chile, pero fue contundente respecto a que no hubo minutos en la charla para esta problemática. 

Haya habido o no diálogo sobre este tema, está claro que Argentina y Chile ven con distintos ojos lo que sucede con el régimen de Nicolás Maduro. Mientras Piñera integra el Grupo de Lima, que ha reconocido a Juan Guaidó como presidente interino, y trabaja a la par con la OEA (presidida por Luis Almagro), la posición argentina busca a la vez condenar las violaciones a los derechos humanos pero condenar también los bloqueos que sufre el país sudamericano. 

Por fuera de Venezuela, Fernández sí destacó que se conversó sobre la integración de América Latina, y esto dijo: “Hablamos de la necesidad de que el continente vuelva a unir esfuerzos y vuelva a trabajar en conjunto. A veces pienso que si fuéramos un todo hubiera sido más fácil la negociación con las vacunas, para algunos países que tienen menos recursos y más dificultades para conseguirlas”.Una enseñanza, que espero esta pandemia nos deje, es que no tiene mucho sentido estar divididos y segregados. Aspiro a que podamos, en la diversidad, trabajar juntos por el bien del continente y nuestros pueblos”, concluyó el Presidente.