La visita del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, a Mar del Plata no pasó desapercibida. El funcionario provincial tomó la decisión de pisar la ciudad gobernada por el intendente PRO, Guillermo Montenegro, en lo que fue la previa a la aprobación en el HCD de una propuesta del FDT para que se declare la "emergencia en seguridad".

Berni habla en la tele de la doctrina de Perón, de que no debe haber personalismos, que primero está la patria y el movimiento y sigue jugando en contra de su propio espacio político”, le dijo a Data Clave un alto dirigente del Frente de Todos local.

Sucede que Berni llegó a la ciudad balnearia y, sin parada previa, se fue al Centro de Monitoreo y Operaciones local, donde se encontró con el intendente, a quien le regaló una serie de elogios públicos como parte de una relación que mantienen de cuando el funcionario de Axel Kicillof era ministro de Seguridad nacional y el jefe comunal estaba al frente de la misma cartera en la Ciudad.

En este momento de la campaña no hay malos pasos. Y Berni no se caracteriza por hacer algo sin querer. Embarró la cancha en la previa electoral para mostrarse con el oficialismo local y ni siquiera se reunió con los candidatos locales o seccionales”, agrega la misma fuente.

La bronca con Berni no es solo local. Vale recordar que la pata local es la camporista Fernanda Raverta, titular de la ANSES, pareja también del candidato a primer senador en la lista por la quinta sección, Pablo Obeid.

Sin embargo, el accionar de Berni siempre fue el mismo. Y es que el la el pedido de declaración de emergencia en seguridad de parte del FDT local expuso de manera directa a la cartera del funcionario provincial debido al poco margen de acción que tiene la secretaría de Seguridad local. “Es un tiro por elevación. Si vos pegás en la panza también lo siente la cabeza”, aseguran fuentes inobjetables de la cartera local.

A principios de agosto, el FDT presentó un proyecto de declaración pidiendo la emergencia en seguridad por un año. Un mes más tarde, y al otro día de la visita de Berni, el HCD local la aprobó con el acompañamiento del peronismo local y de Crear Juntos con el fin de “asistir a la protección de vidas y bienes de personas y promover acciones vinculadas a la prevención” en el distrito de General Pueyrredón.

Desde el oficialismo tildaron a la medida de oportunista. Sin embargo, desde el FDT devolvieron el golpe. “Montenegro vino a la ciudad diciéndole a los vecinos que iba a cambiar la situación en seguridad, y no lo logró. Fue su slogan de campaña”, sostuvo Vito Amalfitano, concejal del FDT.

Mientras que Nicolás Lauría, exaliado de Montenegro hoy enfrentado al intendente luego del cierre de listas, aseguró que “hemos tenido dos secretarios de seguridad que vinieron de Buenos Aires y que conocieron la ciudad cuando se enteraron de la designación".

Relaciones peligrosas

Lo cierto es que Montenegro llegó a Mar del Plata con el antecedente de haber sido ministro de seguridad porteño. Prometiendo cambios estructurales a nivel local. Y desde el propio oficialismo hoy hablan en términos peyorativos de una “conurbanización” a nivel local por los altos índices de inseguridad.

Siempre lo dije, el laburo en conjunto y la coordinación, es clave. Tengo una relación de trabajo con Sergio Berni que se remonta al 2009. Planificamos, ordenamos, pero siempre estamos en la calle”, dijo Montenegro.

Y añadió que “trabajamos juntos en el primer Operativo Sol. Un fin de semana con mucha gente lo llamé, vino en helicóptero y puso los recursos. Esto habla de tener una conexión con gente con la que venimos trabajando en la misma especialidad, más allá de las diferencias del partido político que cada uno representa. Todos queremos fortalecer la seguridad en Mar del Plata”.

Por su parte, Berni afirmó que "la Provincia tiene una enfermedad endémica que es la inseguridad”. Lo que está claro, más allá de que ambos hablan un mismo idioma, es que el funcionario provincial necesita del acompañamiento de los intendentes para profesionalizar la policía. Es necesario “poder sacar una ley que, más allá de quien gobierne, se lleve adelante con una visión a futuro”, agregó.

El objetivo es claro: tratar de sumar voces en la misma línea, y más allá del color político, para generar las herramientas necesarias que necesita su cartera para poder mostrar una gestión que permita darle el salto rumbo al 2023. Habrá que ver qué apoyo consigue.