El Gobierno nacional autorizó a operar a Domus Airways, una empresa sin aviones, sin página web y con un historial que ya hizo ruido en el pasado. El dato no sería más que anecdótico si no fuera porque el dueño de la compañía es Damián Luis Toscano, el mismo que durante la gestión de Mauricio Macri montó una aerolínea que tampoco voló, pero que igual terminó vendiendo sus rutas por 700 mil dólares. Todo un modelo de negocios con el sello de la llamada "revolución de los aviones".

La habilitación fue anunciada por la Secretaría de Transporte, que celebró la medida como parte del plan de Cielos Abiertosque empuja Federico Sturzenegger, el ideólogo detrás de la desregulación aerocomercial. Según Transporte, la empresa venía tramitando los permisos desde 2018, pero nunca había logrado la aprobación. Esta vez lo consiguió sin pasar por audiencia pública. Ahora, lo único que le falta a la flamante aerolínea es lo más básico: aviones para volar.

El permiso otorgado le permite operar tres rutas nacionales y siete internacionales, tanto de pasajeros como de carga. Sin embargo, la empresa nunca realizó un solo vuelo. Algunas publicaciones cercanas al oficialismo intentaron disimular la falta de aeronaves con imágenes digitalmente editadas de aviones con el logo de Domus Airways. La realidad es más incómoda: la empresa no solo no tiene flota, tampoco tiene operación visible.

Toscano ya había sido noticia hace unos años con una jugada similar. En 2017, en pleno auge de la liberalización aerocomercial macrista, fundó Alas del Sur, una aerolínea con cero experiencia y sin aviones. A pesar de eso, logró que le otorgaran 30 rutas nacionales. El proyecto incluía una promesa estrafalaria: sumar 20 aeronaves en menos de cinco años. Lo único que llegó a despegar fue la venta de las rutas a JetSmart, que pagó por ellas 700 mil dólares. Luego, la empresa se evaporó.

Por si faltaran ingredientes, en aquel momento Alas del Sur fue señalada por estar encabezada por un grupo de personas sin trayectoria aeronáutica: "una jubilada, un monotributista y un costurero". Este último era, justamente, Toscano, registrado entonces como trabajador del rubro textil. En enero de este año volvió a escena al asumir la presidencia de Domus Airways, reemplazando a Teresa Beatriz Di Cesare, la misma jubilada que integraba la firma anterior.

Ahora, el empresario dice contar con “socios estadounidenses” y promete que la aerolínea despegará en 24 meses con un modelo centrado en clases business y premium economy. Pero la historia reciente deja poco margen para el entusiasmo. El negocio, hasta ahora, siempre estuvo más vinculado a las habilitaciones vendibles que a los vuelos comerciales reales.

Como si todo esto fuera poco, el director comercial de Domus Airways es Fernando Arriete, un nombre que sacude recuerdos en la industria. Arriete fue gerente comercial de Southern Winds, la aerolínea que protagonizó uno de los mayores escándalos aeronáuticos del país con las "narcovalijas". En 2004, casi 60 kilos de cocaína fueron hallados en un vuelo sin pasajeros hacia Madrid. Arriete fue detenido y estuvo preso casi dos años, aunque terminó absuelto.

Actualmente, Domus Airways debe tramitar el Certificado de Explotación de Servicios Aéreos ante la ANAC para poder comenzar a operar las rutas asignadas. Mientras tanto, no tiene aviones, ni personal visible, ni base operativa. Y lo único que parece haber despegado con éxito hasta ahora es la capacidad de su dueño para conseguir permisos que, por ahora, solo existen en papel.