Incidentes en la marcha que encabezan jubilados, médicos y organizaciones en el Congreso
Una nueva jornada de protestas sacude la Ciudad de Buenos Aires. Jubilados, trabajadores de la salud, organizaciones sociales y referentes políticos se movilizan este miércoles al Congreso. El fallo contra Cristina Kirchner y los recortes en salud y jubilaciones, los motores del descontento.
La movilización al Congreso de este miércoles 11 de junio no es una más. A la tradicional concentración de jubilados autoconvocados se le sumaron médicos residentes, trabajadores de la salud, organizaciones sociales, gremios y sectores del feminismo. Todo en un mismo reclamo: frenar el ajuste. Pero también un hecho detonante potenció la bronca. La reciente decisión de la Corte Suprema, que dejó firme la condena a Cristina Kirchner, cayó como una bomba y multiplicó las consignas en defensa de la exmandataria.
En ese marco, en las inmediaciones del Congreso, sobre la Avenida de Mayo y Santiago del Estero, se registraron los primeros incidentes entre un grupo de manifestantes y un grupo de la Policía de la Ciudad.
“El pueblo va a salir a la calle”, adelantaron desde sectores kirchneristas, y no exageraban. Desde las 15, la Plaza Congreso se llena de columnas que llegan por Rivadavia, Callao y Entre Ríos. CTA, UTEP, el Movimiento Evita, organismos de derechos humanos, gremios docentes y colectivos de discapacidad también participan.
Las consignas principales giran en torno a la “defensa de la democracia”, el repudio al “ajuste brutal” del Gobierno de Javier Milei y la denuncia por “persecución judicial” a Cristina. Pero hay reclamos muy concretos que afectan el día a día: la eliminación de la moratoria previsional, la quita de medicamentos del PAMI, el veto al aumento de haberes jubilatorios y la crítica situación del hospital Garrahan, símbolo del malestar en el sector salud.
Y no solo el Garrahan alza la voz. En paralelo, los médicos residentes y concurrentes de los hospitales porteños que dependen de la Ciudad convocaron a un paro y movilización. Se concentran en el Obelisco desde temprano y marchan hasta la sede del Ministerio de Salud porteño, donde buscan entregar una carta a Fernán Quirós. El reclamo: “recomposición salarial urgente”, “plus por guardias” y rechazo a lo que denominan “la nueva carrera médico-hegemónica”. También exigen ser incluidos en el cobro del SAMO, un punto que ya había sido planteado por los residentes del Garrahan semanas atrás.
Desde el Gobierno nacional, en tanto, se encendieron todas las alarmas. El Ministerio de Seguridad preparó un fuerte operativo de contención, con vallados reforzados y presencia policial en puntos clave del centro porteño. La aplicación del protocolo antipiquetes genera preocupación: ya dejó heridos, detenidos y denuncias por uso excesivo de la fuerza en movilizaciones anteriores.
El Congreso será, otra vez, epicentro de tensiones. En la Cámara de Diputados avanzaron proyectos clave: aumento para jubilaciones mínimas, bono extraordinario, prórroga de la moratoria previsional y declaración de emergencia en discapacidad. Todas iniciativas que tienen respaldo opositor, pero que el Poder Ejecutivo ya anticipó que vetará. El argumento: “No hay plata”.
La marcha también se enmarca en el sacudón que provocó el fallo de la Corte contra Cristina. El martes hubo actos en Rosario, protestas en Chaco, marchas en el AMBA y hasta vigilias frente a su casa en Constitución.