La fiscal Gabriela Baigún se inclinó por sobreseer a todos los imputados en el proceso judicial iniciado por una denuncia de la actual diputada nacional Graciela Ocaña. La hipótesis inicial sostenía que habían existido irregularidades en la licitación para la entrega de kits “Qunita” que incluían cunas, chupetes y moisés para bebés. 

En un momento de la causa incluso se había ordenado la destrucción de los kits, medida que finalmente nunca llegó a concretarse. La lista de imputados en la causa incluye al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández, al actual ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires Daniel Gollán y al actual viceministro Nicolás Kreplak, entre otros.

La militancia kirchnerista, y también dirigentes de peso, tomaron la novedad para reflotar una postura política a favor de una iniciativa sanitaria impulsada en tiempos de Cristina Fernandez de Kirchner presidenta. Algunos, incluso pidieron al gobierno volver a impulsar una política pública que renueve el plan.

“No estaría mal la verdad”, dijeron fuentes de salud del gobierno de Axel Kicillof. La cartera provincial justamente la conducen dos de los referentes del ministerio de Salud del último gobierno de CFK. Sin embargo, aseguran que el tema no fue discutido para nada. 

El ministerio a cargo de Daniel Gollan tiene también a Nicolas Kreplak como vice. Ambos, fueron mencionados en la causa que ahora la fiscalía pide cerrar. “Es razonable pensar en la vuelta del plan Qunita pero capaz antes tenemos que reconstruir algunas cosas que teníamos en 2015”, afirmaron en off fuentes provinciales a Data Clave.“Primero derechos de base para la gente, pero suena posible”, sentenciaron.

En las redes sociales, el kirchnerismo celebró el avance judicial en la causa que involucró desde principios de 2016 a varios líderes del gobierno kirchnerista. Una dirigente de peso, Juliana Di Tullio, actual suplente en la lista de senadores que encabezó la ex presidenta en 2017 y presidenta del bloque de Diputados hasta el último día de mandato de CFK, fue una de las que pidió la vuelta de las Qunitas en las redes.

“Es una expresión de deseo y un acto de justicia. El daño que le hizo esa denuncia falsa de Ocaña y Bonadio contribuyó a desproteger a niños y niñas en la primera infancia. Todo país serio debería tenerlo y no ver este papelón al que asistimos con la quema de material y otro tanto acumulado en un galpón”, apuntó la ex diputada en exclusiva a Data Clave y aclaró: “Es un deseo y una opinión política”.

Tuit de peso en el kirchnerismo

La referente del peronismo bonaerense aseguró que el Plan Qunita “es una gran política para la primera infancia y para contribuir a cortar con los círculos de pobreza en las familias”. Además, apuntó que no tiene nada que ver con su cargo actual pero “soy una dirigenta política y tengo opinión sobre las políticas de mi gobierno y las que creo que debería tener”.

La vuelta de un posible plan como el que se desarrolló en 2015 tiene que surgir del Ejecutivo ya que no es una ley sino “una política de salud”. En el Frente de Todos desestiman que tenga que involucrarse el Congreso, por el contrario, “si surge, surge de la voluntad política de reparar un daño causado por maldad pura y de la evaluación del Ministerio de Salud o Desarrollo Social de que es una política muy importante para la primera infancia”, explicó Di Tullio.

Paula Penacca, actual diputada nacional del Frente de Todos

Legisladores nacionales como Paula Penacca, referente de La Campora en la Ciudad de Buenos Aires, también se hizo eco de la noticia y manifestó su disposición a "trabajar para volver a implementar" el plan Qunita. El impulso cruzó los dos lados de la General Paz.

El fallo judicial envalentonó al kirchnerismo y le dio argumentos para renovar un pedido que estuvo guardado todos estos años. “En el dictamen de la fiscalía surge de manera inequívoca que el daño causado al Estado lo generó la denuncia. Eso se tiene que reparar políticamente”, finalizó la ex presidenta del bloque Frente Para la Victoria en Diputados.