Cerrado el debate por el acuerdo con el FMI y tras disparada de la inflación, una discusión cobró fuerza dentro del Congreso: la dolarización de la economía. Tal como lo adelantó Data Clave, esta semana la discusión creciente en Juntos por el Cambio terminó con un proyecto del diputado Alejandro Cacace (Evolución Radical) que “Establécese el dólar de los Estados Unidos de América como moneda de curso legal de la República Argentina”.

Cacace es parte del bloque Evolución Radical, órgano legislativo del senador Martín Lousteau y del economista Martín Tetaz. El proyecto de ley del puntano tiene casi treinta páginas de fundamentos, propone llevar adelante un proceso de dolarización para “estabilizar la economía y solucionar el problema de la alta inflación”. Se trata de la primera iniciativa presentada en el Congreso y plantea adoptar unilateralmente como moneda de curso legal en la Argentina el dólar estadounidense, para reemplazar al peso en tan solo seis meses.

El bloque de los “díscolos radicales” se creó en diciembre del año pasado cuando no pudieron quedarse con la presidencia que ocupa Mario Negri en el bloque UCR. Si bien existe un compromiso de ambas partes de consensuar una unificación en el futuro, no hay plazos ni certezas. 

En la bancada que conduce el histórico diputado por Córdoba la iniciativa no logra adhesiones y hasta “causó risas” cuando se oficializó. Se preguntan de dónde saldrían los dólares para ir al cambio de moneda. En este sentido, creen que el proyecto no tienen ningún tipo de posibilidad de ser tratado en la Cámara baja. Las diferencias entre los bloques radicales son parte del trasfondo parlamentario. 

El propio Gerardo Morales presidente del partido radical, salió al cruce del proyecto del diputado de Evolución Radical. “Rechazo terminantemente el payasesco proyecto presentado por un diputado de Evolución”, dijo el líder del partido UCR. 

Pero tampoco logra tener un apoyo explícito del PRO. Gerardo Milman, vicepresidente del bloque y referente del “ala dura”, había dicho en declaraciones televisivas que el tema era “debatible” pero consideró que sin atacar el déficit una dolarización terminaría igual que la convertibilidad.

No solo esto. Además la medida reúne el rechazo de otro espacio fundador de la coalición opositora. La Coalición Cívica de Elisa Carrió ya advirtió internamente. “No tenemos una posición aún pero es una línea que se debe definir en la mesa nacional de Juntos por el Cambio”, aseguró una fuente parlamentaria del bloque de “Lilita”. 

Sobre los fundamentos del proyecto de adoptar la moneda estadounidense como propia en Coalición Cívica son categóricos: “Nuestros economistas no coinciden”. El bloque de Carrió tiene un enfrentamiento directo con los espacios libertarios, sobre todo con Javier Milei, y lo dejan en claro en cada iniciativa que pueda asociarlos. “Bien dijo Milei que somos sucios socialdemócratas”, apuntaron desde el bloque con risas.

El diputado “libetario” es un impulsor de la dolarización desde antes de llegar al Congreso. Sin embargo, el otro referente del liberalismo, José Luis Espert, se muestra crítico con la iniciativa. El legislador sostiene que la solución a la inflación “ya está inventada” y que es tener un déficit estable.

El debate está abierto. El proyecto ya está ingresado y tiene estado parlamentario. Que la discusión estará presente al interior de Juntos por el Cambio es un hecho, que pueda llegar a discutirse en el Congreso, una moneda en el aire.