Revelaron parte del expediente de la historia clínica de Diego Armando Maradona y la misma complicaría a su ex médico personal y neurocirujano, Leopoldo Luque; y a la psiquiatra, Agustina Cosachov por posible mala praxis. En parte de ese documento alertaban sobre posibles consecuencias por llevar adelante la rehabilitación en el country, y no en la clínica.

El Diez ingresó el 5 de noviembre a la Clínica Olivos con un alias “Gómez, Ariel” con el fin de que nadie pudiera tener acceso a su internación. Al mismo tiempo se utilizó documentación y fecha de nacimiento que son falsas. De acuerdo a parte del parte que publicó Infobae, en uno de los primeros párrafos indican quienes fueron los especialistas que participaron: “En la fecha se produce una reunión entre los familiares del paciente (hijas), el Dr. Leopoldo Luque (médico de cabecera), la psiquiatra de cabecera del paciente (Dra. Cosachov), el Dr. Pablo Dimitroff (Director de CLIO) y quien suscribe, Fernando Villarejo, jefe médico de Unidad de cuidados Intensivos”.

Aquí surge el primer dato que llamó la atención en la fiscalía de San Isidro y desmentiría lo que vienen negando tanto Luque como Cosachov. A los dos se los menciona, en sus respectivas especialidades, como “médicos de cabecera” de Maradona. “Esto es fundamental para la causa porque estamos hablando de un documento central que los menciona directamente como los responsables de la salud de Maradona. No estamos hablando de un papel cualquiera sino directamente de la historia clínica del paciente. Evidentemente para el médico que firma no hubo dudas de que ambos eran los médicos de cabecera”, explican en los tribunales de San Isidro.

Parte del expediente que publicó Infobae sobre la situación clínica de Diego Maradona
Parte del expediente que publicó Infobae sobre la situación clínica de Diego Maradona

En el punto 2 del documento está lo más importante y que dejaría en claro la responsabilidad de Luque y Cosachov al momento del alta de la clínica apenas 6 días después, el 11 de noviembre. Cabe recordar que Maradona fue dado de alta con inmediatez y pasó sus últimos días en el el barrio privado San Andrés.

“Todos los presentes entienden los riesgos a los que se expone el enfermo si no se somete al tratamiento requerido y se explicita claramente que por las características del paciente en particular también hay riesgos de no tener éxito inmediato con la administración de las drogas indicadas y que a su vez éstas, aún a dosis controladas y con monitoreo adecuado pueden deprimir la conciencia y el drive respiratorio de modo que el paciente pueda necesitar apoyo ventilatorio y asistencia nutricional. Se explicita asimismo las complicaciones eventuales de estas condiciones”, dice parte del texto.

En el final del documento el médico Villarejo, jefe de la unidad de cuidados intensivos de la Clínica Olivos, y quien suscribe el escrito aclara: “No se puede presumir a la fecha el tiempo que demandará lograr controlar el proceso de abstinencia. Debido a las condiciones de pandemia contextuales, se deja claro a médicos y familiares que si bien requeriremos contar con la presencia de familiares y allegados para llevar a cabo el proceso de rehabilitación, siempre se deberá reducir el riesgo de contacto social y deberá haber en la habitación del paciente, el menos número de personas posibles”.