“Vamos a tener que repensar todo el sistema de salud. Las prepagas no saben dónde colocar a la gente. Dicen los que saben que tal vez vengan otras pandemias. Lo peor que nos puede pasar es negarnos a discutir la realidad”, dijo el lunes Cristina Fernández de Kirchner y volvió a encender la discusión de la integración de todos los componentes del sistema de Salud, bajo control estatal. 

Ese fantasma había sido anticipado en diciembre del 2020 y revelado con detalles por Data Clave. Pero esta vez, y en casi exactas 24 horas, la Unión Argentina de Salud no dudó en contestar y en duro comunicado cuestionó con dureza las declaraciones de la vicepresidenta, criticó al Gobierno de Alberto Fernández, adelantó que se presentarán ante la Justicia para que se cumpla con la Ley de Medicina Privada y solicitaron asistir al Congreso para exponer la crítica situación que enfrenta el sector. 

Lo hicieron primero a través de un comunicado y luego en una conferencia de prensa que encabezó Claudio Belocopitt, el presidente de la UAS y titular de Swiss Medical.

Se trata de un organismo que integrado por obras sociales, prepagas con y sin fines de lucro, sanatorios, hospitales de comunidad, centros de diagnóstico y tratamiento, servicios de emergencia, personal en relación de dependencia y profesionales independientes, que atienden, en su conjunto, a cerca del 70% de los pacientes de la Argentina.

“Los recursos de declaraciones públicas o conferencias de prensa para exponer situaciones de extrema gravedad, manifiestan el fracaso del diálogo y de la política”, dice el comunicado de la UAS, en una de sus primeras líneas, en un mensaje directo a quien fuera dos veces presidenta de la Nación. 

Las distintas cámaras y asociaciones que integran esta institución señalan luego que desde el inicio de la gestión de Alberto Fernández que comunicaron “los graves problemas de financiamiento del sector que se vienen arrastrando desde hace años”, y que aún así “no hubo forma de generar un marco de ordenamiento entre las autoridades y el sistema privado de salud, para que éste pudiese generar una planificación que le permitiera tener mínimas certezas hacia el futuro”.

Reunión entre el Gobierno y la UAS, previo a la pandemia
Reunión entre el Gobierno y la UAS, previo a la pandemia

Advirtiendo sobre la necesidad de revisar el financiamiento del sector, sostienen luego que esa discusión se “pasó para después” con el inicio de la pandemia, pero resaltan que incluso en ese momento “circularon borradores de decreto que mencionaban un eventual plan de gobierno para estatizar el sistema”.Realizan también una radiografía del frustrado diálogo con el Ejecutivo Nacional, al sostener que nunca les llegó una respuesta al problema de fondo del sistema “que contiene a millones de argentinos”. 

Según los redactores del comunicado, “la situación técnica de atraso es gigante y la sustentabilidad ha dejado de ser una opción para las organizaciones”. Este es el punto principal al que hace referencia la UAS, mientras se discute una posible reforma, el sector sufre una desfinanciación crítica. Es por eso que el miércoles se presentarán ante la justicia “para pedir una medida cautelar urgente que exija al Gobierno y a las autoridades correspondientes el cumplimiento de la Ley”. 

Además, le exige al presidente Alberto Fernández que si va plantear un nuevo sistema de Salud que lo haga “en forma franca y transparente y que esté dispuesto al debate con la gente”. “Tenemos un gobierno que verbal y técnicamente reconoce la existencia de un desfasaje a esta altura inmanejable, y aún así no  cumple con la Ley de Medicina Privada, que obliga a estudiar las estructuras de costos de las empresas y a otorgar, en consecuencia, las actualizaciones necesarias”, agregan.

Desde la UAS esbozan que el Gobierno podría tener intenciones de desfinanciar al sector para luego “salir al rescate”. En ese sentido, y a modo de metáfora, responden que no estarán dispuestos “a ser los comandantes de esos vuelos, para que los aviones caigan en el camino o deban tomar rutas alternativas, donde las tormentas generen condiciones de viaje espantosas”.

Sobre el final, rescata el trabajo de todos los que integran el sistema de salud de Argentina durante la pandemia, y reclaman la injusticia respecto a que “muchos de los gremios hayan logrado durante el último año actualizaciones de hasta un 40%, mientras el personal de salud, que se ha jugado su vida y la de su familia, siga humillándose para conseguir lo que más que nadie se merece”.

En semanas de alta tensión política, Cristina reflotó el lunes un conflicto que parecía congelado y al Gobierno se le abrió un nuevo frente de batalla.