El expresidente Mauricio Macri se fue del país en un curioso momento para su fuerza política, el PRO, que vive por estas horas una interna feroz para definir sus candidaturas de cara a las PASO. Lejos de las reyertas internas, el exmandatario participó de un acto del Partido Popular en España, donde aprovechó para cuestionar al gobierno de Alberto Fernández.

"No se puede vivir un intervencionismo mayúsculo como hemos vivido en esta pandemia, donde hay que pedir permiso hasta para ir a sacar al perro", disparó Macri. Y agregó: "Al final le entregamos la vida a una persona que no es de mi familia. ¿Por qué tenemos que hacer ese acto de fe? Le pido a la gente más que nunca que confíe en sus capacidades. Y a partir de ahí, peleemos todos juntos".

Luego, fiel a su estilo, el otrora presidente de Boca Juniors utilizó una metáfora futbolera: "La forma de confiar en un gobierno es donde te arma una cancha donde podes jugar. Somos responsables de cortar el pasto, pintar la cancha y poner los arcos. Y los ciudadanos hacen los goles. Nosotros no".

Por último, sobre la administración del país, señaló: "En un modelo absolutamente liberal no habría ningún tipo de impuesto, pero nosotros aprendimos que hay cosas que hay que administrar en conjunto, pero tienen que ser las cosas esenciales".