Macri resiste presión de intendentes PRO para acordar con LLA y sube a la UCR a la discusión
Los jefes comunales buscan que el presidente del partido amarillo dé la venia para avanzar en un pacto político en PBA. Sin embargo, el exprimer mandatario se mostró con un intendente radical y llamó a un mensaje de unidad. Visita a Mar del Plata.
El presidente del PRO, Mauricio Macri, no está dispuesto a ceder en la puja interna que mantiene hacia adentro del partido que lidera. Su objetivo es claro: ser quien lleve la rienda, suelta o corta, de un acuerdo electoral con La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires.
El expresidente de la Nación conoce muy bien la rosca política que antecede a un cierre de alianzas y está decidido a no correrse de la toma de decisiones. Macri sabe bien que lo que está en juego es el sello del partido que creó y no quiere ser furgón de cola de nadie.
“Mauricio va a llevar todo hasta donde haga falta con tal de poner al PRO arriba”, le cuenta a este medio un dirigente territorial de diálogo frecuente con el expresidente. “La Libertad Avanza tiene un peso en presente, pero la política es continuidad. El PRO tiene historia y un peso territorial que ellos no solo no tienen sino que no tienen con qué lograrlo”, agrega la misma fuente.
Macri, quien este miércoles reunirá a la tropa propia en Mar del Plata, busca alcanzar un pacto político que permita que LLA no se fagocite al PRO de la misma manera que el partido amarillo ya hizo con los radicales durante la alianza de Juntos por el Cambio. Y es por eso que no llamó la atención que el expresidente se mostrara en las últimas horas con un intendente de la UCR justo al mismo tiempo en el que los jefes comunales bonaerenses del PRO se reunían para crear una foto que permita presionar a su líder institucional.
Con su visita a Balcarce, donde se mostró en compañía de Esteban Reino, el expresidente expuso que no tiene intención de dejarse presionar y que está dispuesto a jugar de la forma que sea necesario para bajar un mensaje claro a los suyos sobre quién es el que manda.
"Hay que dejar de lado las pequeñas cosas, las internas, las operaciones. Hay que concentrarse en trabajar juntos”, aseguró el exmandatario en una conferencia de prensa que brindó en el Salón de los Intendentes de la Municipalidad. No fue solo un mensaje hacia LLA sino también hacia la propia interna del PRO. Macri abrió una vez más el juego y llamó a apuntar los cañones contra el “modelo populista” y en particular hacia Axel Kicillof, a quien caracterizó como “un gobernador que destruye valor todos los días”.
Con su una imagen sugestiva en un momento delicado, el expresidente volvió a sentar en la mesa opositora al radicalismo. Sin embargo, no parece haber suficiente sillas para todos. Como es sabido dentro del partido centenario también hay fuertes diferencias entre dos facciones internas que se acusan mutuamente de estar con Milei o Kicillof, según de donde venga la crítica.
Lo cierto es que los libertarios tampoco comulgan con la idea de que los radicales puedan entrar en la mesa de discusión y buscan que los dirigentes del PRO corran a Macri de las negociaciones políticas de la provincia de Buenos Aires con el claro fin de poder lograr una mayor representación.
Encuentro porteño
Los intendentes bonaerenses del PRO se juntaron este martes en CABA con el fin de poder hacer valer su fuerza territorial y elevar un mensaje concreto hacia arriba. El grupo de los 13 estuvo presente en su totalidad. Soledad Martínez (Vicente López), Pablo Petrecca (Junín), Guillermo Montenegro (Mar del Plata), Javier Martínez (Pergamino), María José Gentile (9 de Julio), Ramón Lanús (San Isidro), Sebastián Abella (Campana), Marcelo Matzkin (Zárate), Diego Reyes (Puan), Juan Ibarguren (Pinamar), Fernando Bouvier (Arrecifes), Jorge Etcheverry (Lobos) y Lisandro Matzkin (Pringles).
Quien bajó el mensaje al finalizar el encuentro fue el presidente del PRO bonaerense, Cristian Ritondo: "Faltan meses para que se presenten las alianzas. Ahora es un trabajo más de distrito por distrito, de cuidar la gobernabilidad de nuestros intendentes, de ampliar y entender que debe haber un frente común para ganarle al peronismo que, más allá de sus peleas, va a ir de manera unificada”, aseguró al finalizar un encuentro que duró poco más de una hora y media.
Claro, hacia adentro no todos piensan lo mismo. El macrismo también tiene su representación. Sin embargo, a la hora de bajar un mensaje conjunto lo que se acordó fue la idea de que “cualquier acuerdo tiene que ser institucional”.
El encuentro también sirvió para despejar algunos fantasmas tras el salto a LLA de Diego Valenzuela (Tres de Febrero) y Fernanda Astorino (Capián Sarmiento). “Vamos a seguir dialogando, pero no hay ninguna posibilidad de que nuestros dirigentes vayan con su boleta. El acuerdo tiene que ser de partidos”, le dijo uno de los asistentes a Data Clave.
Más allá de los beneficios que algunos intendentes ven en lo concreto de un acuerdo con LLA, el desdoblamiento de las elecciones llevó a que, como le contó la misma fuente a este medio, “muchos se preguntaron para qué vamos a levartarle el precio a un partido que no tiene ni concejales en algunos de los distritos”
Así las cosas, la reunión no dejó ninguna resolución inmediata más que una nueva convocatoria para reunir a más de 300 concejales con el fin de generar un encuentro que sirva para mostrar la presencia territorial de un partido que se niega a quedar relegado y que intenta sobrevivir. ¿A qué costo?