El ministro del Interior de Bolivia, Arturo Murillo, sostuvo que “jamás se detuvo a ningún diputado argentino” y que “(Federico) Fagioli mintió en Migraciones”. Sigue el revuelo con el Frente de Todos en vísperas de las elecciones.

“Anoche ha habido una corriente de desinformación indicando que se habría detenido a diputados argentinos. Eso jamás sucedió. Jamás la Policía Boliviana ni Inmigración detuvo a nadie”, afirmó el ministro, en rueda de prensa.

Varios diputados nacionales del Frente de Todos fueron invitados por el Senado boliviano para participar como veedores de las próximas elecciones presidenciales, que se celebrarán el domingo. Tras llegar, señalaron que hubo maltrato policial y que a Fagioli lo demoró la policía por más de 10 horas.

El escándalo fue tal que se pronunció al respecto mediante twitter el Presidente Alberto Fernández, quien le exigió a “la dictadura de Jeanine Añez” la inmediata liberación del legislador del oficialismo.

Sobre esto, Murillo explicó: “Sí se le dijo al señor Fagioli, diputado argentino, que no era bienvenido a Bolivia y que por favor regresara a su país. Él vino con otros diputados argentinos. Con los otros no hubo ningún problema”.

En esa misma línea, marcó: “Esperamos con los brazos abiertos absolutamente a todos los veedores que quieran venir. (...) Lo único que pedimos nosotros es que no hagan injerencia, que no vengan a meterse en problemas internos. Los bolivianos ya estamos lo suficientemente maduros como para resolver nuestros temas en las urnas”.

Por último, señaló: “Quiero dejar en claro que la seguridad de absolutamente todos los observadores y los que no son observadores, de los que ha invitado el MAS, está absolutamente garantizada en nuestro país, porque nuestro país es 100% democrático”.