Días atrás, preocupó a propios y ajenos el sorpresivo contratiempo de salud del Presidente Alberto Fernández durante su gira por París y Bali. En efecto, una gastritis erosiva lo privó de participar de la cumbre del G20. A su regreso, se sometió a estudios y no se detectó ningún cuadro de gravedad, pero sí se le recomendó reposo. Este último consejo médico terminó de bajar al mandatario nacional de una nueva gira por México. 

Fernández tenía pautada una visita a tierras aztecas para el 24 y 25 de noviembre, pero ya no será posible por su salud. No obstante, también trascendió un malestar del gobierno argentino con la administración mexicana por la decisión de mantener su candidato al BID y no apoyar la designación de Cecilia Todesca al frente del organismo. 

Previo a los eventos de los últimos días, el Presidente tenía en agenda participar de la Cumbre de los países de la Patria Grande. Allí, estaba pautada una reunión bilateral con su par mexicano Manuel López Obrador. 

Sucede que Alberto contaba con el apoyo de López Obrador para avanzar con la candidatura de Todesca, integrante del grupo Callao y actual secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería. Nada de esto ocurrió y no le quedó más remedio que bajar su postulación para mantener la cuota de poder en el directorio del BID. 

En este sentido, la negociación argentina con Brasil y Estados Unidos dio resultado positivo para el Gobierno, ya que se quedará con tres cargos en la nueva administración, incluida una de las vicepresidencias del banco regional de desarrollo. 

Cabe señalar que el viaje a México tenía por objetivo también unir en una misma imagen a distintos referentes de la Patria Grande, como el chileno Gabriel Boric e incluso el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.