El presidente Alberto Fernández habló este jueves en Los Ángeles y, entre otras cosas, expresó su deseo de que los próximos encuentros tengan una dinámica diferente: "hubiésemos querido otra Cumbre de las Américas, el silencio de los ausentes nos interpela" y agregó que "el hecho de ser país  anfitrión de la Cumbre no otorga la capacidad de imponer un derecho de admisión sobre los países miembros del continente".

El discurso del Jefe de Estado llamó la atención por las críticas directas a los Estados Unidos y el embajador argentino en el país, Jorge Argüello, aseguró que "de ninguna manera ha sido un discurso en contra de la administración de Biden. Si Alberto Fernández hizo críticas, fue al gobierno de Trump y nunca una relación bilateral se va a ver afectada si los interlocutores hablan con claridad y sinceridad". 

"Biden valora la claridad conceptual del presidente Alberto Fernández" añadió el diplomático y remarcó que el discurso presidencial finalizó con la invitación a la Cumbre de la CELAC. "Estamos en tiempos muy ricos de esta relación bilateral porque hay mucho intercambio, mucha comunicación", aseguró. 

En diálogo con la prensa, el embajador adelantó que "Biden llamó a Fernández y lo invitó a la Casa Blanca para discutir preocupaciones compartidas como como la crisis energéticas, la crisis de alimentos y otros que tienen que ver con la agenda global". Este encuentro será la última semana de julio, tentativamente el 25 y "esto marcha un hito en la relación bilateral".