El Gobierno de la Ciudad anunció que a partir de 2022 todos los cursos de quinto año de las secundarias tendrán que pasar por prácticas laborales de forma obligatoria, en horario escolar y como parte del proceso evaluativo para terminar el nivel medio.

La medida se aplicaría desde el año que viene sobre 29.400 estudiantes de 442 colegios secundarios y se enmarca en la aplicación del plan Secundaria del Futuro, considerado una profundización de la Nueva Escuela Secundaria (NES). Contempla que las prácticas laborales no rentadas se realicen en el sector productivo (privado o público); el sector de gestión de políticas públicas; el ámbito cultural y comunitario o instituciones de la educación superior y el área científico-académico y tendrán una duración de 120 horas cátedras que se distribuirán a lo largo del año.

Trini Villafañe, referenta del Centro de Estudiantes del Osvaldo Pugliese y estudiante de 5to año, manifestó “En 2017 nos enteramos de la Secundaria del Futuro porque se filtró un documento, si era por el Gobierno de la Ciudad no había ninguna instancia de diálogo con las comunidades educativas sobre este proyecto y hoy nos encontramos con lo mismo. Una vez más, Larreta y Acuña quieren avanzar con propuestas que van en contra de lo que queremos y necesitamos les estudiantes, ahora pretenden aplicar las pasantías que venían anticipando con la Secundaria del Futuro de forma totalmente irregular".

"Esta reforma se viene aplicando año a año en cada vez más escuelas piloto, el año que viene en quinto año solo se debería aplicar la Secundaria del Futuro en los colegios que empezaron en 2018 pero ahora dicen que las pasantías son para más de cuatrocientos colegios", agregó.

En la misma línea, Caterina Maiorana, estudiante de 4to año de la Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano y referenta de la agrupación estudiantil Lobo Suelto, declaró: “Desde las comunidades educativas vemos que estas prácticas laborales son una forma de facilitar mano de obra precarizada al sector privado, de generar las condiciones para la precarización laboral que vivimos les jóvenes. Las pasantías no pueden ser obligatorias, no pueden ser una prioridad por sobre nuestra educación, que se ve que el macrismo quiere recortar para sacarnos conocimiento, especialmente sobre nuestros derechos como se refleja en la baja de presupuesto desde que ingresó al poder en la Ciudad".

Para la estudiante, "si tanto les preocupa el empleo joven como decían en campaña, si tanto le preocupa a Acuña nuestro futuro, podría empezar por escucharnos, por recibirnos y por priorizar nuestras urgencias antes que sus negocios".

Desde el ámbito gremial, se refirieron a la imposición como "trabajo precarizado" y tanto UTE-Ctera como Ademys sostuvieron que la decisión del gobierno de CABA "no contribuye al desarrollo de los jóvenes", advirtieron que "la escuela secundaria no tiene este propósito" y acusaron al jefe de Gobierno de querer impulsar el trabajo precarizado de estudiantes.

Incluso la Unión de Trabajadores de la Educación porteña (UTE-CTERA) criticó la iniciativa presentada por el jefe de Gobierno de la Ciudad. La titular de la organización, Angélica Graciano planteó que “desde el Ministerio (de Educación) impulsan el trabajo precarizado de estudiantes y la escuela secundaria no tiene este propósito. Tendrían que estar trabajando en la orientación e inclusión de los estudiantes en los circuitos de educación superior”.

"Desde el Ministerio impulsan el trabajo precarizado de estudiantes y la escuela secundaria no tiene este propósito. Tendrían que estar trabajando en la orientación e inclusión de los estudiantes en los circuitos de educación superior", agregó Graciano.

Ambos gremios criticaron lo que entienden como “improvisación” sin tener prevista la implementación. Además, indicaron que no tuvieron "ninguna reunión ni trabajo en este sentido" previamente. “Está hecho para producir de titulares", aseguraron.

El programa alcanzaría a los 11.250 alumnos de 5° año de las 116 escuelas de gestión pública y los 18.150 alumnos del último año de los 326 establecimientos de nivel secundario de gestión privada, que funcionan en territorio capitalino. Pero no formarían parte de esta iniciativa los 3.000 estudiantes de las 52 Escuelas Técnicas del distrito (tanto de gestión estatal como privada puesto que ya implementan prácticas profesionalizantes en 5° y 6° año.

En este sentido, desde el gobierno porteño se habló de cuatro prioridades: "Primero en lo que respecta a tecnología; segundo más horas de clase; tercero la capacitación docente, porque para formar a los estudiantes del futuro necesitamos docentes del futuro; y cuarto la transformación de la escuela secundaria, para que tengan prácticas educativas en el mundo del trabajo".

Por su parte, la ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, remarcó que las prácticas formativas serán de 120 horas cátedras que se suman a 30 horas de un espacio de capacitación y formación sobre educación financiera.