El comienzo de las sesiones extraordinarias corre riesgos porque Juntos por el Cambio anunció que no facilitará el tratamiento de ningún proyecto de ley hasta tanto no concluya esta nueva embestida del oficialismo contra el poder judicial “representada por el pedido de juicio polìtico a la Corte Suprema”.

La oposición especula con que el Frente de Todos no tendrá los votos para avanzar con el proceso y resolvió no acompañar ninguna iniciativa que promueva el Poder Ejecutivo hasta tanto no se desactive el embate promovido por Alberto Fernández, junto a una decena de gobernadores.

Además del proyecto contra Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, el presidente prepara un proyecto para impulsar la nueva moratoria para jubilados que beneficiará a 800 mil personas; y el proyecto de blanqueo de capitales que enviará el ministro de Economía, Sergio Massa, para reforzar la recaudación. 

Durante el fin de semana lo adelantól senador nacional y precandidato a jefe de Gobierno porteño, Martín Lousteau, al plantear que “hasta que el Juicio Político contra la Corte no salga de la escena, nada se puede debatir con el Gobierno”. Este domingo los presidentes de los bloques que conforman el espacio opositor se reunieron y decidieron que asistirán a la Comisión de Juicio Político una vez que sea citada con el objetivo de hacer caer el pedido encabezado por el Poder Ejecutivo.

El FdT tendría el camino allanado en este primer paso ya que cuenta con 16 de los 31 votos, siempre y cuando ninguno se de vuelta a último momento. El oficialismo no tiene margen y la oposición apunta a lograr un voto negativo de los diputados que integran el Frente de Todos. Luego del tratamiento en la Comisión, debería emitirse un dictamen para ser debatido en recinto, donde la iniciativa requiere del respaldo de dos tercios de los diputados presentes, número que el oficialismo no alcanza a reunir.

La oposición adelantó que no dará quórum, no facilitará nada. Si el Gobierno insiste con el Juicio Político al Máximo Tribunal, el Congreso estará paralizado lo que resta del verano. Si Juntos por el Cambio no baja al recinto y el oficialismo llega a los 129 diputados para dar comienzo a la sesión, necesitará solo de 86 votos para avanzar en este punto. En este escenario, el bloque opositor estaría obligado a participar de la sesión para modificar la votación.