Un escándalo político y judicial sacude a Ushuaia, donde la subsecretaria municipal Vanesa Sáez fue acusada de liderar junto a su ex pareja, Matías Roa, una presunta estafa piramidal que habría perjudicado a unas 20 personas. Sin embargo, la Justicia descartó las denuncias en su contra por falta de pruebas, mientras que su principal acusadora, Romina Cirigliano, ahora enfrenta cargos por acoso y hostigamiento.

El conflicto comenzó cuando Cirigliano denunció haber sido víctima de un esquema que prometía retornos del 40% en dólares a cambio de inversiones para un supuesto emprendimiento inmobiliario en Brasil. Según su relato, los primeros pagos llegaron como prometido, pero en enero de este año, el flujo se cortó, dejando una pérdida que, en su caso, asciende a 50 mil dólares.

La denuncia pública de Cirigliano incluyó audios en los que Roa supuestamente la amenaza con frases como: “Te la exploto toda. Levanto el teléfono y explotan”. Además, sostuvo que el grupo de damnificados, conocido como “Los Arbolitos”, enfrenta situaciones similares, con montos que oscilan en decenas de miles de dólares.

Por su parte, Sáez negó cualquier implicación con el esquema y aseguró que ella misma es víctima de amenazas por parte de Cirigliano. “Me hostiga, me manda mensajes, saca fotos de mi propiedad. Todo esto es para que pierda mi trabajo”, declaró. Además, destacó que la mujer llegó a presentarse en su domicilio y a romper vidrios en la casa de su ex pareja, lo que motivó una orden de restricción en su contra.

Promesas en dólares, acusaciones y amenazas: la trama de una estafa en Ushuaia

La situación escaló cuando Cirigliano recibió una notificación judicial que advertía sobre su incumplimiento de las medidas de restricción impuestas por la Fiscalía. En su perfil de Facebook, la vecina respondió: “¡No voy a acatar órdenes de ningún juez! Voy a seguir hablando y nombrando a quien sea”.

Mientras tanto, la abogada de Cirigliano, Griselda Engelhard, denunció la falta de acción judicial efectiva. “Las denuncias no se tramitan. Les dicen que vayan al fuero civil, pero sabemos que no funciona para esto. La gente está desesperada”, expresó.

El caso también desató críticas hacia el intendente Walter Vuoto, a quien se acusa de no tomar medidas contra Sáez, quien sigue en funciones. Las redes sociales han jugado un papel clave en amplificar el conflicto, con fotos que muestran a Sáez en situaciones de aparente alto poder adquisitivo, como viajes al exterior y autos de lujo, aunque la funcionaria desmintió que esos bienes le pertenezcan.

Sáenz junto a su ex pareja
Sáenz junto a su ex pareja

Por ahora, el foco de la Justicia parece haberse desplazado de la supuesta estafa hacia el hostigamiento y las amenazas mutuas entre las partes. Mientras tanto, los damnificados siguen sin recuperar su dinero y sin respuestas claras de las autoridades.