(De la redacción de DATA CLAVE) Un grupo comando, integrado por tres delincuentes, asaltó la Planta Receptora de Comunicaciones de la Prefectura Naval Argentina, ubicada en Ezeiza. Secuestraron a tres oficiales -que no resultaron heridos-, robaron armas y equipamiento y se dieron a la fuga.

El hecho se desató el sábado por la noche cuando uno de los delincuentes, encapuchado, increpó a uno de los efectivos que estaba saliendo del establecimiento. Le apuntó con un arma y lo obligó a ingresar nuevamente. Tras lograr su cometido se sumaron los otros dos ladrones que lo acompañaban en la operación.

Una vez dentro del lugar, redujeron a otros dos efectivos y los dejaron a todos atados de pies y manos. No hubo ningún herido y tampoco se precisó ningún tipo de tratamiento psicológico o médico.

Se constató que se llevaron tres pistolas Pietro Beretta, con 9 cargadores y 135 proyectiles calibre 9 mm; también una escopeta Benelli, calibre 12,70, con 50 cartuchos calibre 12,70 (25 propósito general y 25 antitumulto); y tres chalecos antibala. Las autoridades pudieron apreciar que el lugar estaba revuelto, con ropa tirada en el piso, cajones abiertos y puertas de armarios violentadas. Por ende, aún continúan evaluando si hay más faltantes.

La investigación calificada como "averiguación de robo" yace en el Juzgado Federal Nº 2 de Lomas de Zamora, a cargo del juez Juan Auge, quien como suele suceder en estos casos dictó el secreto de sumario. Por su parte, el fiscal ordenó buscar huellas en el lugar, tomar declaraciones testimoniales de los efectivos para hacer los respectivos identikits y realizar el análisis de las cámaras de seguridad.

Los investigadores entienden que el ataque fue planificado y estudiado por gente que conoce los movimientos de la zona y sabe trabajar con discresión. Segú Infobae, uno de los prefectos relató que los ladrones dijeron: "A ustedes los vendió una policía de La Matanza, agradézcanle, los veníamos estudiando hace rato". Hasta ahora no hay sospechosos identificados.