La presidenta de AySA, Malena Galmarini, ya dejó en claro cuáles son sus intenciones: en las próximas elecciones competirá para ser intendenta de Tigre. Claro, no será fácil. El jefe comunal, Julio Zamora, no tiene intención de soltar su cargo e intentará revalidar su mandato. El gran problema que hay por delante es que la dirigente del Frente Renovador avisó que, en esta oportunidad, no dará el brazo a torcer.

Con este marco la pelea a nivel local será dura. Sucede que el Frente de Todos todavía no definió qué es lo que pasará en los territorios. la decisión está sujeta al ámbito nacional. A quién o quiénes serán los representantes para las elecciones. Y de ahí, recién, se desprenderá cómo se irá resolviendo la cuestión municipal.

Sin embargo, este no es un caso menor. Por varios motivos. Malena es la referencia local del ministro de Economía, Sergio Massa. Y, tras bajar sus aspiraciones en 2019 en pos de la unidad, algo que también sucedió en las partidarias de 2022, cuando asumió la presidencia del PJ, Lucas Gianella (Kolina) como parte de un acuerdo con Zamora, tiene claro que en esta oportunidad no pasará lo mismo.

Lo cierto es que hoy la grieta interna ya no tiene margen de arreglo. Y como le dijeron desde adentro, en diálogo con Data Clave, “no se trata de pelear para acomodar listas, Malena quiere ser intendenta y ya le toca ese lugar”

El gran problema que enfrenta hoy el Frente de Todos es que el zamorismo viene de perder las elecciones de 2021 ante el candidato de Juntos, Segundo Cernadas, quien se encamina a ser nuevamente cabeza de boleta para estas elecciones. Y pese a que las legislativas no siempre tienen su correlato en las generales, la preocupación existe.

Cada vez que puede, Galmarini aprovecha para salir a instalar una campaña compleja por la dinámica interna que hoy tiene en vilo al Frente de Todos de cara a lo que será el cierre de listas del próximo 24 de junio. En su paso por el barrio Almirante Brown, conocido como Garrote, la funcionaria nacional fue clara con respecto a la situación local. "Hoy, los vecinos de Tigre están sufriendo, es una injusticia. Ver el abandono, las luces encendidas de día, los montículos de basura, juegos de plazas rotos, habla de mala calidad de vida. Vinimos a ver si podemos hacer un poquitito de justicia social”.

Galmarini no ahorra críticas a la hora de apuntarle a Zamora. Y lo deja a la vista. Con dolor y preocupación nos quedamos al ver las dificultades diarias que tienen frente a la ausencia del municipio y viendo en qué podemos ayudar”, lanzó.

Las diferencias internas son grandes. El municipio hoy no cuenta con representación del massismo, mientras que en el HCD el bloque del Frente de Todos tiene 9 de los 12 concejales a su favor por lo que funciona como el principal objetor de la tareas del intendente. Justamente en los últimos días, y tras el pedido de los ediles del Frente Renovador, buena parte del gabinete municipal dijo presente en el Concejo Deliberante para dar las explicaciones del caso luego del anuncio de Zamora por la creación de un hospital de alta complejidad.

Según los concejales del FR “sólo hay financiamiento para las losas”. Sobre la visita del funcionarios, la edil Mayra Mariani manifestó: "Vinieron cuatro funcionarios y quedaron más dudas que certezas. No sabemos cómo van a contratar enfermeros ni médicos teniendo en cuenta que hoy no se pueden cubrir las vacantes en los centros de salud y los vecinos tienen que hacer fila durante la noche para conseguir un turno para dentro de tres meses”.