“Tengo el deber de dirigirme a Usted a fin de elevarle mi renuncia al cargo de Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto con el que me honrara oportunamente”, dice la nota enviada por Felipe Solá al presidente Alberto Fernández, fechada este 18 de septiembre en la Ciudad de México.

“Al hacerlo, agradezco su confianza en este tiempo y hago votos por su ventura personal y la recuperación plena de nuestra querida Argentina”, continúa la misiva redactada sin trasuntar el malestar del funcionario al enterarse que se quedaba fuera del gabinete tras la reestructuración anunciada en la noche del viernes.

Solá iba a participar este sábado en la ciudad de México de la VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), con una propuesta de “fortalecer” bloque como “instrumento de interlocución política entre los países de la región y el resto del mundo”, pero se enteró en pleno vuelo que iba a ser reemplazado por Santiago Cafiero y se prevé que vuelva esta misma noche al país.

Su agenda contemplaba, además, reuniones bilaterales con sus pares de la región, en compañía del jefe de Gabinete de la Cancillería, Guillermo Justo Chaves, pero en las últimas horas se conoció la noticia que Solá decidió no participar de la cumbre.

Solá aterrizó en México para aceptar la titularidad de la CELAC en nombre de la Argentina, por pedido del Presidente, quién decidió bajarse de la gira por la grave crisis política que atraviesa su gobierno. Así, quedó trunco lo que sería el gran acierto diplomático de su gestión.