Trabajadores del Garrahan se levantan contra recortes y desmantelamiento del sistema sanitario
En el Día Mundial de la Salud, profesionales del Garrahan encabezan una manifestación contra la gestión sanitaria de Javier Milei y Mario Lugones. Denuncian desmantelamiento del sistema público, despidos masivos y precarización laboral.
En pleno Día Mundial de la Salud, los trabajadores del Hospital Garrahan decidieron poner el cuerpo nuevamente y salir a la calle. Este lunes, convocados por la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT) del centro pediátrico, se concentran frente al Ministerio de Salud de la Nación, sobre la Avenida 9 de Julio al 1900, para exigir que “la salud sea un derecho y no un privilegio”. El reclamo apunta directamente a la gestión del presidente Javier Milei y al titular de la cartera sanitaria, Mario Lugones.
La movilización se organiza junto a otras agrupaciones como Cabildo Abierto y el Frente en Defensa de la Salud y la Vida, que participan de una radio abierta frente a la sede del Ministerio. Con carteles, micrófono y visibilidad, apuntan a visibilizar una realidad que, aseguran, está siendo ignorada por el Gobierno: “La destrucción del Sistema Público de Salud”.
“Nos pronunciamos en defensa de la Salud Pública y la vida: organizaciones de usuarios, científicos, hospitales, sindicatos independientes y la comunidad”, señaló en un comunicado que acompañó la convocatoria. El texto no deja lugar a interpretaciones suaves: denuncian que la administración nacional está “liquidando salarios y puestos de trabajo”, además de desmantelar áreas clave del Ministerio que articulaban políticas de prevención y tratamiento de enfermedades.
Pero el malestar no termina ahí. Según los organizadores, la crisis sanitaria también afecta de manera directa a la población: “Abandonan a usuarios que pelean por su vida, jubilados con medicamentos recortados, obligándolos a elegir entre comer o comprar remedios”, advirtieron. Las críticas van más allá del plano laboral y se insertan en una denuncia más amplia sobre el retroceso en el acceso a la salud.
El reclamo tiene un eje común: la reincorporación de los despedidos. Bajo la consigna “en Salud no sobra nadie”, apuntan contra los recortes aplicados por el Gobierno nacional y alertan que estos despidos no solo afectan a los trabajadores, sino a todo el entramado que garantiza atención médica en condiciones dignas. La movilización también plantea una defensa férrea del modelo de salud pública, gratuita y de calidad.
“Hacemos un llamado urgente a toda la comunidad para sumarse”, expresaron desde la APyT, en un intento por sumar apoyo y convertir la protesta en un punto de inflexión. La medida de fuerza llega en un contexto de creciente malestar entre sectores profesionales y científicos, que ven con preocupación la orientación del Ejecutivo en materia de financiamiento y políticas sanitarias.
La protesta del Garrahan no es un hecho aislado. Desde hace meses, distintas ramas del sistema público de salud vienen advirtiendo sobre ajustes presupuestarios, reducción de programas y condiciones laborales precarizadas, en especial tras la eliminación de varias áreas dentro del Ministerio. En paralelo, crecen los reclamos por la falta de insumos y la sobrecarga en hospitales nacionales.
El Hospital Garrahan, que depende del Estado nacional y es uno de los centros pediátricos más reconocidos del país, fue históricamente símbolo de la medicina pública de alta complejidad. Su personal ya había alertado en otras oportunidades sobre la pérdida del poder adquisitivo, los atrasos salariales y el déficit de personal, pero esta vez decidió concentrar la bronca directamente frente a la sede del Ministerio. La jornada de este lunes, en pleno centro porteño, promete ser una nueva postal del creciente conflicto entre los trabajadores de la salud y el Gobierno libertario.