Un nuevo escándalo rodea a altos funcionarios del gobierno. Tras conocerse el default de la petrolera Aconcagua Energía, las miradas quedaron puestas en el presidente del Banco Nación, Daniel Tillard, y comienzan a analizar su renuncia.

El diputado nacional y dirigente bancario, Carlos Cisneros, le pidió al gobierno nacional que solicite la renuncia de Tillard, luego de la polémica en la que estaría involucrado su hijo. “El Banco Nación no es el negocio de una familia”, apuntó Cisneros

El legislador tucumano señaló que “según se reveló en medios nacionales, el titular del BNA ordenó la compra de bonos por $400 millones a una empresa quebrada, Aconcagua Energía, sin el aval del directorio y con la intervención directa de su hijo Ignacio Tillard, quien como colocador de la deuda se quedó con una comisión del 1%".

Según trascendió, el titular del Banco Nación habría ordenado la compra de un bono de la petrolera independiente Aconcagua Energía S.A. De la colocación del bono participaron 9 entidades, entre las que estuvo Max Capital, de la cual uno de sus socios es Ignacio Tillard, hijo del funcionario del BNA. En calidad de Agente de Liquidación y Compensación (AlyC), Max Capital habría percibido una comisión del 1% sobre el monto colocado.

"No es la primera vez que el Banco Nación es utilizado para beneficiar a empresas privadas con vínculos políticos", apuntó el diputado y agregó: Ya lo vimos durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando el Banco le otorgó créditos millonarios por encima de los límites legales a Vicentin, una empresa que terminó defaulteando más de 1.500 millones de dólares y que aún hoy sigue envuelta en causas judiciales por fraude”

La semana pasada, se dio a conocer que la petrolera posee una deuda de $447.604 millones y que impulsará el proceso de refinanciación de su deuda “ante las condiciones desafiantes del mercado de capitales que han dificultado el acceso a fuentes de refinanciamiento en términos compatibles con la sostenibilidad del giro ordinario de sus actividades operativas”.

“Estamos frente a un caso que combina discrecionalidad, nepotismo y negocios cruzados con fondos públicos”, afirmó Cisneros y agregó: “Es inaceptable que se usen recursos del banco estatal más importante del país para salvar a empresas privadas en default y beneficiar a familiares del presidente de la entidad”.

En el medio, el Banco Nación anunció el cierre de 60 puntos de atención, entre sucursales, centros PyME y oficinas operativas. La medida tiene como objetivo reducir costos y modernizar la estructura del banco, al tiempo que proyecta un ahorro total superior a los $1.000 millones.

Frente a esta medida, Cisneros señaló que el gobierno impulsa el Plan Estratégico 2024-2027 bajo el pretexto de "eficiencia y modernización", que ya derivó en "despidos, jubilaciones anticipadas y abandono de zonas donde el Nación es el único banco operativo". Por esta polémica, Tillard quedó en el ojo de la tormenta y en el gobierno nacional estarían evaluando pedir su renuncia.