La Confederación General del Trabajo (CGT) repudió este lunes cualquier "ataque político" cuyo objetivo "era disciplinar y condicionar, entre otras organizaciones, a los representantes del movimiento obrero".

A través de un comunicado, la organización se refirió a la denuncia de la Agencia Federal de Inteligencia, conducida por Cristina Camaño, contra funcionarios de la exgobernadora bonaerense al conocerse videos en los que quedaron registradas reuniones promoviendo el armado de causas contra dirigentes gremiales. 

"Ante la aparición de hechos que permiten confirmar, definitivamente y sin dudas, que en la Argentina existió durante el gobierno de Cambiemos un artero ataque político cuyo objetivo era disciplinar y condicionar, entre otras organizaciones, a los representantes del movimiento obrero, merece nuestro repudio institucional", afirmaron desde la CGT.

El Consejo Directivo Nacional sostuvo que "el poder político de la provincia de Buenos Aires, en la gestión de la coalición de Cambiemos, desee tener como herramienta de control y dominación una policía secreta tipo GESTAPO nazi, habla por sí solo del objetivo persecutorio y disuasorio contra las organizaciones gremiales y democráticas".

Y continuaron: "Nos encontramos con un verdadero modus operandi coordinado por el poder político, donde el fin no era otro que quitar derechos y condiciones a los y las trabajadoras, apuntando directamente y con causas armadas a dirigentes sindicales". 

De este modo, la CGT rechazó "enfáticamente" cualquier tipo de "maniobras que se alejan de las prácticas democráticas que necesitamos para construir un país donde la división de poderes sea un valor importante para convivir en paz y armonía social".

También reclamaron la intervención de la Justicia ante la denuncia y concluyeron: "Los derechos y conquistas laborales no pueden ser saqueados a través de mesas judiciales o acuerdos a espaldas de los trabajadores. Cada beneficio en cualquier Convenio Colectivo o en el marco legislativo de protección laboral ha sido el producto de la fuerza solidaria de los trabajadores. Y eso no puede, ni debe, someterse a la intencionalidad política de un gobierno para beneficiar a los socios de turno".