Hace apenas 20 días, un tren que une la estación de Plaza Constitución con la ciudad de Bahía Blanca descarriló a 10 kilómetros de la localidad bonaerense de Olavarría, lo que provocó heridas leves a 22 personas. En la causa judicial, el juez federal Gabriel Di Giulio dispuso la prohibición para la circulación de los trenes en el tramo Cañuelas- Bahía Blanca. Esta situación generó malestar en el sector ferroviario, especialmente La Fraternidad -sindicato que agrupa a los maquinistas-, el cual anunció y ratificó un paro nacional para este martes.

Este martes hubo una reunión con carácter de urgencia entre el gremio y el ministerio de Transporte de la Nación. Poco más de media hora después, se anunció que desde las 10 de la mañana se levantaría la medida. No obstante, el servicio retomará su funcionamiento normal cerca del mediodía.

En la previa, el sindicato, liderado Omar Maturano, argumentó que la Justicia Federal "optó por lo más fácil" y "contra el sistema ferroviario".

El propio Maturano sostuvo que la vía del ferrocarril se arregló a las 72 horas y que se puede reanudar el servicio "con las precauciones del caso". Esgrimió, asimismo, que la medida es "en defensa de la industria ferroviaria y los puestos de trabajo vulnerados por las medidas judiciales".

Tweet de La Fraternidad

"Sino se restaura el servicio, también vamos a realizar medidas por más tiempo", había advertido el líder sindical. Desde el sector de Trenes Argentinos confirmaron que esta situación afectaría el servicio "al menos durante la primera mañana". Se verían afectados todos los servicios: área metropolitana, regionales y larga distancia.