El Poder Judicial de Entre Ríos quedó en el ojo de la tormenta tras conocerse tres graves denuncias contra el fiscal Guillermo Uriburu y los jueces Marcelo Baridón y Arturo Exequiel Dumón. Las acusaciones derivaron en la intervención del Superior Tribunal de Justicia (STJ) provincial.

El primer caso que difundió en los medios fue el del fiscal interino de Rosario del Tala, Guillermo Uriburu, quien fue denunciado en reiteradas ocasiones por violencia de género. El STJ, conocida la denuncia, dispuso un sumario administrativo porque Uriburo es escribiente titular del Juzgado en lo Civil y Comercial N° 1 de Nogoyá y, además, le requirió la intervención al titular del Ministerio Público Fiscal, Jorge Amilcar Luciano García.

Las aguas parecían calmas, pero nuevamente se conoció otra denuncia contra un funcionario judicial. Esta vez se trataba de Marcelo Baridón, integrante de la Cámara Contencioso Administrativa de Paraná. El juez fue denunciado por abuso por su propio hijo.

El joven hizo publica la acusación en sus redes sociales: "No suelo postear cosas en relación a mi vida personal, pero creo que esta situación lo amerita. Estoy concluyendo un proceso de cinco años de terapia. Comencé a ir porque me sentía muy mal por haber sufrido un abuso sexual en mi infancia. Fue un camino muy difícil el de llegar hasta acá y probablemente lo siga siendo. Vivimos en una sociedad que avala este tipo de actitudes aunque, por suerte, las cosas van cambiando en este sentido”.

Tras conocerse la noticia, el STJ ordenó la suspensión precautoria del vocal al entender que “no se encuentra en condiciones de disponer de la imprescindible paz espiritual necesaria para el correcto ejercicio de su delicada función de impartir justicia”.

Horas más tarde salió a la luz otra denuncia, ahora contra el vocal del Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguaychú, Arturo Exequiel Dumón, quien fue acusado por su expareja por violencia de género.

En la presentación, la mujer relató más de 11 episodios de violencia física y económica. Varios de los hechos habrían ocurrido cuando la denunciante se encontraba embarazada y el STJ resolvió ordenar el inicio “de una amplia información sumaria a fin de recabar datos sobre la conducta" del juez, mientras avanza la causa.