Desde el inicio de la gestión de Alberto Fernández que la oposición presenta proyectos para modificar el sistema electoral y pasar a la boleta única de papel que ya convive con las elecciones provinciales de varios distritos del interior. Los casos de Santa Fe y Córdoba, los más mencionados. Una reforma a la que el peronismo tradicional se resiste históricamente a cambiar la boleta por partidos.

Este inicio de periodo ordinario de sesiones en el parlamento estuvo marcado por el debate del acuerdo con el FMI, pasado este escollo, los bloques empiezan a delinear sus agendas. Un tema apareció con fuerza con dos proyectos desde las bancas de Juntos por el Cambio: la elección de 2023. El diputado Emilio Monzó (Encuentro Federal) presentó un proyecto para modificar las PASO que contiene la Boleta Única y Silvia Lospenatto (PRO) hizo lo propio con una iniciativa para restituir el voto por correo para los residentes en el exterior, hago que había instalado Mauricio Macri por decreto y que el gobierno del Frente de Todos derogó.

La propuesta del ex titular de la Cámara de Diputados durante el gobierno de Cambiemos además de contener la incorporación de la Boleta Única de papel establece también que las elecciones primarias no sean obligatorias “ni para los votantes, ni para las coaliciones que tengan una única lista de candidatos”.

“A pesar de que las internas son sanas y fundamentales para la democracia, no tiene ningún sentido que si algún espacio político ya consensuó su lista de candidatos, se le exija participar de la interna”, dijo el diputado nacional y agregó: “el hecho de que sean obligatorias aún en el caso de listas únicas, convierte a las PASO en una encuesta que nos sale cara a los argentinos”.

Por su parte, la diputada del PRO, impulsa un proyecto que tiene adhesiones en los bloques federales para que los residentes en el exterior puedan participar de los escrutinios de 2023 vía correo. Un fuerte electorado opositor. “El Voto por Correo es un derecho que el kirchnerismo eliminó por DNU afectando a miles de argentinos que residen en el exterior”, apuntó la legisladora en sus redes. La iniciativa crea “un registro de electores en el exterior” para incluir en todas las elecciones nacionales a aquellos argentinos con domicilio fuera del país.

Un compromiso asumido por el FdT

Cuando la pandemia amenazaba la realización de las elecciones de medio término en 2021 el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, se acercó a los líderes del parlamento para pedir que se sancione una ley que cambiará las fechas del cronograma electoral. Allí, la oposición logró un compromiso del oficialismo para que sea el único cambio, que se realicen las PASO y que se discuta al año siguiente distintas propuestas para cambiar el sistema electoral. La oposición no lo olvida.

En el interbloque Federal también hay propuesta propia para crear un instrumento de boleta unificada en las votaciones. El proyecto lleva la firma del presidente de bancada, Alejandro “Topo” Rodriguez y de la diputada Graciela Camaño. “Si en 2023 no votamos con Boleta Única de Papel es porque el gobierno no quiere”, dijo el titular del interbloque a Data Clave. 

“Hace ocho meses tuvimos la oportunidad de avanzar con un cambio fundamental en la forma de votar en Argentina. Estaba al alcance de la mano la posibilidad de ponernos de acuerdo en el Congreso para incorporar la Boleta Única de Papel. Pero lamentablemente nos dijeron que 'no hay tiempo' y -una vez más- todo se postergó sin fecha ni compromiso de ningún tipo”, agregó el diputado.

En el Congreso suele decirse que las modificaciones al sistema electoral sólo pueden darse con un debate parlamentario “serio y profundo” durante los años pares, cuando no hay elecciones. La oportunidad se presenta con una oposición fuerte en números en ambas Cámaras y con un peronismo enredado en peleas internas. Si no es este año, deberá dormir una vez más, hasta 2024.