El Servicio Penitenciario Bonaerense aseguró este martes que el protocolo de utilización de celulares dentro de las cárceles "redujo la cantidad de delitos" cometidos por esa vía en la provincia.

Esta aclaración se originó por el pedido de los legisladores de Juntos por el Cambio Matias Ranzini Alex Campbell para que se prohíba la utilización de los teléfonos y se derogue el protocolo que entró en vigencia con la pandemia.

"En primer lugar, corresponde aclarar que esta disposición fue llevada adelante en el ámbito penitenciario bonaerense luego de una decisión del máximo tribunal penal de la Provincia que así lo dispuso. Las razones de esta resolución judicial estuvieron ligadas a la pandemia Covid19 y a la necesidad de cesar las visitas a las personas detenidas en unidades penales como forma de evitar contagios masivos que colapsaran el sistema de salud pública -objetivo que finalmente logró alcanzarse-", precisó el organismo a través de un comunicado.

Desde Servicio Penitenciario provincial explicaron que el protocolo "circunscribe su utilización a las actividades educativas a distancia y a los contactos familiares, establece un Registro de celulares que identifica fehacientemente a cada usuario, delimita los ámbitos habilitados para el uso de telefonía celular y prohíbe las redes sociales -con excepción de whatsapp-".

También agregaron que "se implementó en línea con decisiones adoptadas en este mismo sentido por 14 provincias de nuestro país y servicios penitenciarios de Europa (entre ellos, el de España y Gran Bretaña".

"Desde la regulación del uso de los celulares no solo se ha logrado disminuir la cantidad de delitos cometidos desde las unidades penales a través de dispositivos móviles, sino que la implementación del protocolo posibilitó el rápido esclarecimiento de ese tipo de ilícitos y la pronta imposición de la sanción correspondiente", concluyó.