La mamá y el papá de Guadalupe Lucero Cialone, la niña que fue vista por última vez el 14 de junio de 2021 en San Luis, podrán este miércoles ver las prendas de vestir que se hallaron durante el rastrillaje realizado este martes por efectivos de Gendarmería y de la Policía Provincial en la denominado "zona cero".

El abogado defensor del padre de la niña, Héctor Zabala, sostuvo que "en un 90 por ciento estoy seguro que los restos óseos pertenecen a un animal" y que entre las prendas se encuentra "una calza pequeña y unas botitas número 30". Además, el letrado que patrocina a Eric Lucero agregó que la zona es "como un basural y allí hay restos de vacas, chanchos y zorros, además de ropa", por lo que consideró que el "hallazgo que fue comunicado ayer" por el Fiscal Federal Cristian Rachid, "no despertó demasiada expectativa por las características del lugar y las declaraciones de una antropóloga que aseguró que los restos podían ser no humanos". 

Zabala apuntó que, sin embargo, la noticia reproducida "causo mal impacto en el papá de Guadalupe que no se encuentra bien" y esta tarde deberá enfrentarse a la exhibición de la "ropa encontrada en el lugar".

 El operativo ordenado por la Policía Federal bajo la instrucción del fiscal Rachid continuó hoy en la "denominada zona cero", donde junto a los efectivos el funcionario judicial ratificó que las nuevas intervenciones se planifican hasta "el próximo viernes" y que hay un "sin fin de otras medidas en curso" tendientes a dar con el paradero de la niña.

También, aclaró que los nuevos operativos se realizan a instancias de lo indicado por la colaboración técnica de la Colectiva de Intervención contra las Violencias, un equipo especializado en antropología que tiene experiencia en la búsqueda de personas, bajo ciertos parámetros forenses y que tienen para "nosotros especial interés en base a hipótesis de una posible sustracción de la menor e incluso un accidente".

Los rastrillajes se enfocan en las líneas de investigación que apunta a un posible secuestro de la niña y un accidente, esto último a raíz de lo que habría dicho una niña a psicólogos, testimonio que se logró a través de actividades de juego.

La menor, que padece un retraso madurativo, "habría regresado el día de la desaparición de Guadalupe con la ropa embarrada y restos de pasto en la cabeza, reproduciendo una versión poco entendible sobre la niña desaparecida, por la que se infiere la posibilidad de un accidente en un juego entre ellas", explicaron fuentes vinculadas a la causa.

Los nuevos rastrillajes fueron ordenados por la Justicia federal, que se encuentra a cargo de la causa desde diciembre del 2021, luego de que la Justicia provincial declinara de continuar investigando y ante la presunción que se podría estar ante delitos de órbita federal.