El intendente de Chacabuco, Víctor Aiola (UCR), presentó el mes pasado un programa con el que buscaba aplicar una nueva normalidad en la ciudad y así beneficiar a la economía local. Se trató del programa “Cuidar fuentes de trabajo” con el que el jefe comunal buscó que los sectores más perjudicados por la pandemia puedan desarrollarse pese a las distintas restricciones actuales.

El municipio elevó a la Provincia un pedido concreto para lograr la apertura de los locales gastronómicos y gimnasios para aquellas personas que ya fueron vacunadas o que hayan transitado la enfermedad en los últimos tres meses sin saber que un mes más tarde se convertiría en uno de los disparadores por los que la Provincia puso en marcha el pasaporte sanitario anunciado ayer por el gobernador Axel Kicillof.

Hace 15 días, un domingo, Carlos Bianco me llamó para decirme que iban a ir por ahí. Quizá ahora no lo reconozca, pero lo importante es que podamos trabajar en conjunto entre nación, Provincia y municipios sin importar de donde venga la idea. Fundamentalmente, que tengamos la agenda de la gente y no la de la política”, le cuenta Aiola a Data Clave.

El programa que puso en marcha el jefe comunal radical, quien también es médico, se basó en que “tenemos un gran cantidad de personas que ya tuvieron Covid y un número considerable que ya tienen las dos dosis. Ambos ya tienen un riesgo bajo de volver a enfermarse y también de requerir internación, por lo tanto el concepto es que desde ese grupo poblacional podamos darle una mano a ciertos comercios y que empiecen a funcionar”.

De esta manera, las personas que puedan corroborar que tuvieron Covid en los últimos tres meses o que están vacunados con ambas dosis ya pueden ingresar en locales gastronómicos o gimnasios.

El carnet con el que los vecinos de Chacabuco puede ampliar el aforo de los locales gastronómicos.

Los resultados son buenos. Venimos trabajando bien. No lo hicimos para que la gente se vacune sino para darle una mano a los comerciantes. En fase 2 era muy difícil sostener lo gastronómico y los comerciantes me decían que no querían subsidios, sino trabajar. En este contexto podemos garantizar el trabajo de forma segura y es por eso que lo llamamos pasaporte solidario, porque le damos una mano a los gastronómicos”, le dice a Data Clave.

Ayer Kicillof no solo anunció el pasaporte sanitario que pasará a funcionar desde el próximo lunes, sino que también confirmó el cambio de fase de varios distritos, entre ellos Chacabuco, que volverá a fase 3 y ya podrá recuperar las clases presenciales.

Sin duda, Aiola se convirtió en el intendente del día. Lo que le da un fuerte empujón de cara a las legislativas debido a que la lucha por el voto hoy se focaliza en la salud y la economía, un combo que el jefe comunal abordó por ambos frentes.

Y con respecto a las críticas que despertó la medida provincial en parte de la oposición por el atropello a las libertades individuales, Aiola manifestó que “el tema es desde donde te plantas. En medicina tenemos un dicho que dice ‘Hacer una mal para evitar un mal mayor’. Nosotros lo planteamos desde la ayuda. La libertad no te la da el pasaporte, te la dan las dos vacunas. Es una posibilidad para el comerciante para salir del agobio”.

Vale recordar que en Chacabuco también se puso en marcha el primer test de olfato nacional como prueba de Covid positivo. “hay un vino que se llama Chacabuco, cuyo slogan es ‘Donde todo comenzó’. Hay algo de eso que está pasando”, dice el intendente.

Y para cerrar deja una visión sobre lo que viene: “Dicen que recuperarse de la pandemia en materia económica demorará más de un año en los países desarrollados y más de diez en los subdesarrollados. No podemos perder más tiempo”.