Daniel Vega es un futbolista que no se queda solamente con lo que le dio y sigue dando la pelota. Hoy está en Platense, donde es ídolo y tiene un sexto ciclo a sus 39 años. Ya se podría decir que está en su última etapa, y por eso quiere disfrutarla en un lugar donde siempre estuvo cómodo.

¿Cómo vivió la pandemia? La Primera Nacional se reactivó el mes pasado tras la vuelta a los entrenamientos. En el mientras tanto, muchos de sus compañeros estuvieron sin club. Sin embargo, tras negociaciones de AFA con Agremiados, se consiguió que muchos puedan percibir un salario hasta tanto consigan un club donde jugar.

De mirada política y desarrollo profesional como contador público, Vega conoce el paño del fútbol y la política. En una entrevista con Data Clave, habló de la situación actual, de la decepción por los problemas económicos y sus ganas de en algún futuro poder participar para lograr un cambio.

La entrevista completa:

Data Clave: ¿Cómo estás viviendo la situación actual por la pandemia? ¿Con más alivio por volver a entrenar?

Daniel Vega: Con sensaciones encontradas porque se atrasó el torneo de la Primera Nacional por la indefinición de los formatos. Todavía no sabemos para dónde vamos. Pero yendo a la pandemia, ya es otra cosa, es una alegría y es volver a vivir. Es una rutina que nos hace bien a todos, aunque bueno, es necesario que se reinicie la competencia para que se vuelva rápido. Ya estamos en condiciones de poder volver tras una buena pretemporada.

DC: ¿Te asustaste al principio? Los clubes dejaron de recaudar y se hizo difícil que puedan pagar los sueldos…

DV: La verdad que sí. Sigue sucediendo que no hay conciliaciones que se tendrían que haber dado entre club y jugadores. Se priorizaron otras cosas antes que los derechos de los trabajadores. Es cuestión de ver la cantidad de clubes que aprovecharon la pandemia para construir tribunas. Marca que plata había, pero no voluntad para renovar contratos.

DC: ¿Cómo fue esa negociación de AFA con Agremiados para que muchos jugadores no queden en la nada?

DV: No sé en lo puntilloso porque yo fui un representante del reclamo, no de la negociación. Pero opino que fue perfecta, porque gracias a eso hoy quienes no tienen trabajo cobran un salario garantizado como si estuviese con contrato laboral vigente. Si no era por eso, esos chicos estarían a la deriva. Yo se que puede no ser suficiente, obviamente, siempre se puede más, pero cómo se estaba manejando todo, se llegó al mejor arreglo posible.

DC: En este medio le solemos decir ‘rosca’ a la negociación política para que haya puntos de acuerdo… ¿fue muy difícil consensuar?

DV: Yo cuando hablé con (Sergio) Marchi me dijo que me quede tranquilo porque todos íbamos a tener algún beneficio y no íbamos a quedar a la deriva. Yo confié en su palabra y así fue, no hubo más que esperar que sucedan las cosas.

DC: ¿Qué opinas de la gestión de Claudio Tapia en AFA?

DV: Hay cosas que me gustan realmente, principalmente el trabajo en las Selección Nacional, que me parece preponderante. Luego tengo mis opiniones sobre lo que es alguna manera de manejarse en cuanto al fútbol local. Hay gente que está trabajando en la Liga Profesional y que no me gusta, y que incluso a veces asesoran por el Ascenso. Pero esas son decisiones del presidente y hay que esperar resultados. Pero las políticas a largo plazo de las Selecciones y los trabajos en Juveniles son caminos correctos. Poner a (César Luis) Menotti me parece que es un paso irreprochable y muy bueno, sumado a la incorporación de (Pablo) Aimar, que va a aportar mucha riqueza a nuestro fútbol.

DC: ¿Te interesa la política?

DV: Claro que me interesa. Me interesa mi país en sí, amo Argentina. Veo y trato de informarme. Me duele ver cómo estamos viviendo y la situación que estamos pasando. Veo mucha gente pobre y que sus ingresos están muy por debajo de la línea de pobreza. Es tristísimo vivir de esta forma.

DC: ¿Te ves trabajando en ese ámbito?

DV: No miro a la política como algo para mí todavía, aunque quizás sí para más adelante. Hoy sigo siendo trabajador de fútbol y me dedico también en tratar de mejorar y que los futbolistas adquieran derechos. Trato de dar una mano desde ese lado. Me sirve quizás para prepararme para el futuro, no descarto nada.

DC: ¿Qué opinión te merece la gestión del Gobierno?

DV: Va un año de cuatro recién, así que yo creo en los procesos de gestión. Hasta ahora no veo que venga bien la mano, no te voy a mentir… pero hay que dejar trabajar, esto es así. Ojalá tenga el mayor de los éxitos este Gobierno, porque sería un beneficio para todos. Yo no levanto otra bandera que la mía, deseo que le vaya lo mejor posible y que puedan sacar esto adelante.

DC: ¿Y en cuanto a la gestión de Mauricio Macri?

DV: Creo que fue desastrosa, como todos los que viene apareciendo. El de Cristina me pareció malo sobre el final también. Tengo 39 años recién cumplidos y veo muy pocos años donde la gente se haya sentido contenta y conforme con progresos políticos, es cuestión de mirar las estadísticas. Vivimos de crisis en crisis, y la realidad no está en Macri y Cristina, ya no es una cuestión de bandería política. No veo que haya soluciones para los que más los necesitan. A mí me toca ver mucha gente durmiendo en la calle, y eso a mí me pone re mal, sinceramente. Es algo que no me gusta nada, y hay que hacer algo por ellos.