Las últimas horas fueron noticia por la concreción de miles de despidos de trabajadores estatales. Pero al mismo tiempo, empresarios del sector privado de la salud eligieron esta mismas fechas para comenzar con los despidos de profesiones en instituciones muy conocidas.

Las primeras noticias llegaron desde los Centros Vacunatorios Stamboulian, donde echaron a los 13 médicos pediatras que conforman el staff completo de los vacunatorios, lo que implica dejar sin atención medica a dichos servicios, según denunció la Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP).

Según se indicó, las causas aducidas son la necesidad de “reducir gastos”, “cuando es sabido que esa medida es consecuencia de que dichos vacunatorios fueron comprados por los dueños de los conocidos Centros Rossi”.

Representantes de la empresa fueron los encargados de notificar telefónicamente a cada desvinculado que, desde ese momento, ya no contarían con sus servicios y que en las próximas horas les llegaría el telegrama de despido.

También se informó que incluso intentaron despedir a representantes sindicales, siendo uno de los casos el de una médica que integra la Comisión Directiva de la Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP).

Se suman a este clima de conflictividad la situación de los médicos del Sanatorio Güemes que se declararon en estado de alerta y movilización por la negativa de la empresa a otorgar aumentos acordes a la inflación imperante, y en el marco de la paritaria 2023 que aún se encuentra abierta.